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Tradicional asado colombiano estaría a punto de quedar en el olvido

Las iniciativas ambientales que buscan la disminución en el consumo de carne y de esa forma la reducción en la cría del ganado vacuno, podrían ocasionar que los populares asados en Colombia, sean una cosa del pasado. Esto tras comprobarse que la ganadería es uno de las prácticas con mayor responsabilidad en la producción de gases efecto invernadero.

Foto RCN Radio



Por: Javier Mauricio Jules

Las iniciativas ambientales que buscan la disminución en el consumo de carne y de esa forma la reducción en la cría del ganado vacuno, podrían ocasionar que los populares asados en Colombia, sean una cosa del pasado. Esto tras comprobarse que la ganadería es uno de las prácticas con mayor responsabilidad en la producción de gases efecto invernadero.

Compartir con amigos y en familia alrededor de una carne asada, es algo que forma parte de las tradiciones de nuestro país. Sin embargo según Marcelo Stenberg, docente e investigador del departamento de Biología Molecular de la Universidad de Tel Aviv, esta es una práctica relacionada con los daños que se le causan al planeta.

“El asado en Colombia es parte de la cultura colombiana y no se debate cual es el efecto ambiental de mantener ese tipo de cultura”, y es que “los colombianos consumen más de 45 kilos de carne por año, por persona media, incluyendo los niños”, agrega el investigador. (Lea también: Más de la mitad de los colombianos dejarían a sus parejas por ir al Mundial)

Como consecuencia de este alto consumo de carne, la cría de ganado ha desplazado a la agricultura en Colombia y hoy, según Germán Vélez, director de la Organización Semillas, existen 180 mil hectáreas de deforestación y la puerta de entrada de este proceso, es en su mayoría, la ganadería.

“Según las estadísticas oficiales, en el país hay 40 millones de hectáreas de ganadería y por el contrario tenemos solo siete millones de hectáreas en agricultura”, dice Veléz tras agregar que “debería haber más de 20 millones de hectáreas en labores agrícolas”.

Pero no solo la tala de árboles para sembrar pastos de engorde de ganado, le está haciendo daño a la atmósfera, también el gas metano que producen las vacas con sus excretas.

“En este momento la ganadería industrial en su conjunto produce más emisiones de gases efecto invernadero, que todas las emisiones que producen los autos en el mundo”, advierte el director de Semillas.

En el marco de la cumbre sobre Cambio Climático que se cumple en Alemania, el renglón de la economía ganadera en el mundo, también es parte de las discusiones. Este es un hecho que ya tiene consecuencias en Colombia.

Según José Felix Lafaurie, presidente de Fedegan, gracias al Banco Mundial y con un proyecto que supera los 20 millones de dólares, la ganadería en nuestro país está a punto de cambiar.

“Desde Fedegan hemos venido adelantando un proyecto que se llama ganadería sostenible, que es una ganadería silvo-pastoríl y estamos atendiendo más de 4500 pequeños productores para que hagan tránsito a un tipo de ganadería que es mucho más rentable y amigable con el medio ambiente”, señala el dirigente greminal.

En el planeta existen alrededor de 1400 millones de cabezas de ganado, con una tasa de crecimiento del 2 por ciento anual, casi la misma que representa la población mundial. En Colombia el número es de 30 millones de vacas. Si esas estadísticas siguen con la misma tendencia, en 13 años la ganadería será la responsable del 27 por ciento de los gases de efecto invernadero, con las respectivas consecuencias en el cambio climático.