Seleccionadores nacionales tocados indirectamente por los actos de corrupción de sus dirigentes

Comienzan a aparecer los fantasmas de las salidas en los técnicos de las selecciones que juegan las eliminatorias, luego de jugadas solo cuatro jornadas y con las salidas intempestivas de algunos presidentes de federaciones que hoy están más preocupados por su situación personal que por si se clasifican o no al mundial.

El primero que tembló sin haber jugado fue el argentino José Néstor Pékerman, que vio a la distancia como el presidente de la Federación Luis Bedoya -quien lo había traído a la Selección Colombia- renunciaba sin dar detalles y viajaba a Nueva York para hacerse cargo de presuntas acusaciones en el caso de corrupción de la FIFA. Inmediatamente su sucesor Ramón Jesurum salió al corte y dijo que el técnico es contratado por la Federación y no por el Presidente y las aguas se calmaron.

En Chile las cosas no están mejores. A los dos malos resultados de Jorge Sampaoli (un empate y una derrota), se le sumó la salida intempestiva del presidente de la Federación Sergio Jadue, quien adujo su salida a cuestiones de salud, pero que en realidad viajó a Estados Unidos para intentar arreglar su situación en el caso de corrupción. De inmediato sonaron las alarmas, Sampaoli podría dejar la Selección. El rumor todavía no se desvanece.

En Venezuela el caso es diferente; su presidente Rafael Esquivel está detenido hace más de cinco meses por la misma causa, el problema es el fútbol de la Selección, que marcha sin puntos y con un evidente enfrentamiento entre el técnico Noel San Vicente y los jugadores. El tema parece no tener reversa y la salida del estratega sería la resolución del problema. Marcelo Bielsa suena como el más cercano candidato. ¿Se le medirá a tan incierto proyecto?.

También se habló en su momento de la salida de Gerardo Martino de la Selección Argentina que arrancó mal y de Ricardo Gareca de la del Perú. Los resultados gobiernan a los técnicos, pero ahora se les ha sumado la corrupción mundial del fútbol que tiene a los dirigentes dando explicaciones, pero que ha tocado de lado a los entrenadores.

Hasta ahora ninguno ha tirado la toalla, pero no durará mucho en caer el primero. ¿Quién será?