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Debate entre el Gobierno y comerciantes por precio de los alimentos

Foto RCN Radio



Un fuerte debate se generó entre el ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, y el presidente de Fenalco, Guillermo Botero, por la enorme diferencia en el precio de los alimentos que se abre al comparar los de las plazas de mercado y tiendas de barrio con los grandes supermercados.

El ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, le pidió a los supermercados analizar el tema de la especulación que se ha presentado en el precio de algunos alimentos y así buscar una solución a esta problemática que afecta el bolsillo de los colombianos.

Por su parte, el presidente de Fenalco, Guillermo Botero calificó de descabellada la denuncia sobre una alta especulación en los precios de los alimentos en los supermercados del país.

Entrevista con Guillermo Botero, presidente de Fenalco.


El ministro de Agricultura sostuvo que no puede ponerle topes a los precios de los alimentos, ya que estaría violando la libre competencia, pero propuso que toda la cadena productiva se siente con el Gobierno a buscar una salida a estos incrementos, a los que calificó como desmedidos, en el precio de alimentos como la papa, el cilantro o la cebolla roja, entre otras.

"Si por denunciar que a las amas de casa les están cobrando altos precios me volví castrochavista y populista, entonces así es", afirmó.

"Yo no quiero pelear con los supermercados que son los que jalonan la economía, producen empleo, pero si es necesario sentarnos a analizar este tema, porque alguien se está quedando con la mayoría de las ganancias, mientras al campesino le pagan lo normal y al consumidor le están cobrando precios desmedidos", expresó Iragorri.

Entrevista con Aurelio Iragorri, ministro de Agricultura.


Por su parte, Botero dijo a RCN Radio que “son precios que no se pueden comparar. Esto demuestra, por parte del Ministro, un desconocimiento total del mercado. Al productor se le han aumentado mucho más los costos que a los consumidores".

Sostuvo que en el caso de la papa, en los últimos 12 meses se incrementó un 44 % para el productor, mientras que para el consumidor, el alza fue del 30 %. Lo mismo pasa con las hortalizas, el incremento para el productor fue del 106.7 % y para el consumidor, fue del 49.3 %, según el presidente de Fenalco.

Sin embargo, el Ministro puso como ejemplo la cebolla roja, que tuvo un incremento del 236% y el cilantro del 750%.

"Y cuál es el valor agregado que hace que se presente este incremento tan desmesurado, que lavan el alimento, que le ponen un código de barras", se preguntó el ministro.

Iragorri defendió el pedido para que la Superintendencia de Industria y Comercio adelante las investigaciones, y dijo que aunque "el Ministro no tiene dientes para hacerlo, pero sí tengo la obligación de buscar una solución".

Botero por su parte, expresó que la importación recrudecida por la devaluación, ha hecho que los alimentos que Colombia trae del exterior lleguen más caros.

"Según cifras de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), que señalan que en 2014 se importaron 10.3 millones de toneladas; con un 40 % de devaluación, esta importación en 2015 pudo haber alcanzado las 11.2 millones de toneladas", explicó Botero.

Sobre la acusación del Ministro sobre irregularidades en el manejo de la cadena productiva, por parte de los intermediarios, el presidente de Fenalco dijo que "los intermediarios podrán desaparecer, pero su función no, ya que son personas que recogen el producto en la finca y lo llevan a las centrales de abastecimiento de alimentos, una labor esencial".

El ministro Iragorri expresó que en Consejo de Ministros de este lunes, se analizará el tema, junto con el presidente Juan Manuel Santos.

Para finalizar el jefe de la cartera sostuvo que la meta es que con el plan Colombia Siembra, el país en los próximos años deje de depender de la importación de alimentos, con la siembra de un millón de hectáreas de cereales, hortalizas y frutas.

Mientras que Botero dijo que los colombianos deben preparar el bolsillo para más alzas en los alimentos, por cuenta de los efectos del Fenómeno del Niño y de la devaluación.