Proponen pacto con las élites y los terratenientes para agilizar la restitución de tierras

En el marco del debate La Ley de restitución de tierras, alcances y perspectivas, organizado por El Espectador y se realiza en la Universidad Javeriana, la exministra de Agricultura Cecilia López propuso como una de las alternativas para darle más celeridad al proceso de restitución de terrenos que se adelante un pacto con las élites, los terratenientes y los críticos de la ley.

"Si bien lo importante de esta ley es que tiene una institucionalidad por delante que ha servido para impulsarla, también tenemos que mirar quiénes son los dueños de la tierra y uno se da cuenta sobre todo a nivel regional que es muy difícil llevar a cabo estos procesos", sostuvo.

López señaló que "lo que se necesita es que la dirigencia nacional se la juegue por el tema. Cosa que vemos difícil porque todavía hay una élite que no le juega a la paz o que no la quiere o que se ha beneficiado de la guerra".

Por su parte, el director de la Fundación Paz y Reconciliación, León Valencia, insistió en que actualmente existe un plan para sabotear el proceso de restitución de tierras promovido entre otros por un sector de los ganaderos liderado por Fedegán y algunos personajes de la vida nacional como el procurador Alejandro Ordóñez e incluso sectores afectos a partidos políticos como el Centro Democrático.

"Los principales enemigos de esta política de restitución son los expropiadores que tienen un eco muy grande en partidos políticos con el Centro Democrático también en personas como José Félix Lafaurie, el presidente de Fedegán ahí se arma una alianza entre parlamentarios del Centro Democrático como la representante María Fernanda Cabal e incluso el procurador Alejandro Ordóñez, no quieren que se adelante este proceso", afirmó.

Esta tesis la comparte el senador Iván Cepeda quien señaló que las élites han sido las principales enemigas de la democratización de la tierra.

Para el legislador, es necesario fortalecer la legislación en materia del apoyo que le debe dar la sociedad civil a la misma.

"Aquí hay un componente peligroso para la ley de restitución; por una parte con los grupos armados que se valen de la presión para no dejar que se adelante la restitución de la tierra y por el otro un componente ideológico, con personajes como el Procurador y algunos líderes de partidos de derecha que están buscando que no culmine", indicó.

Entre tanto, Gerardo Vega director de la Fundación Forjando Futuros manifestó que "la ley de restitución de tierras ha sido un fracaso ya que según cifras oficiales, a la fecha han llegado 90.305 solicitudes de restitución a las oficinas del gobierno y hasta ahora han logrado resolver 3.606, menos de un 5%".

Afirmación que no comparte el exministro de Agricultura Juan Camilo Restrepo quién indicó que hasta el momento se ha hecho efectivo el 22% de las solicitudes de restitución de tierras y no el 5% como se ha venido diciendo.

"Una de las razones que tenía más frenado el proceso era una definición de las Fuerzas Militares diciendo que no podía proceder la restitución allí donde se estaban echando bala todavía el Ejército y la subversión, esa restricción ya se levantó y tenía frenado el 50% de las reclamaciones, de manera que yo creo este proceso se podrá tramitar con mayor celeridad", apuntó.

Gobierno

Por su parte, el director de la Unidad de Restitución de tierras, Ricardo sabogal afirmó que la aplicación de la ley de restitución "ha sido un éxito rotundo porque a la fecha se ha restituido 210.000 hectáreas a 21.000 personas entre comunidades étnicas y campesinos".

De igual forma, informó que en más de 45.000 solicitudes han finalizado su trámite, "es decir, más de la mitad del total que han sido recibidas".

Actualmente los jueces de restitución tienen en su poder más de 500 mil hectáreas de tierra para decisión judicial.
Esta cifra representa 12.000 casos que están en espera.

"La ley de restitución de tierras no tiene marcha atrás, seguiremos recuperando la tierra mal habida vida para los campesinos despojados", apuntó Sabogal.