Antonio Celia: precio del gas ‘boca de pozo’ debe tener un límite para evitar disminución en demanda

De acuerdo con Celia Martínez-Aparicio, el límite de precios del gas boca de pozo debería estar en función de los mercados internacionales.

Durante su visita anual al Congreso de Naturgas, Antonio Celia, presidente de Promigas, sostuvo que el sector gasífero colombiano atraviesa por una serie de complicaciones que estarían frenando su desarrollo, entre ellas, que el precio del gas boca de pozo (valor ofertado por los productores) no tenga un precio límite o ‘un techo’, porque desde que se liberó el precio de ese combustible, la demanda comenzó a disminuir.

De acuerdo con Celia Martínez-Aparicio, el límite de precios del gas boca de pozo debería estar en función de los mercados internacionales, “el precio a cómo el (Productor) vende no tiene regulación, es decir, el puede vender al precio que quiera. Si tú haces eso es porque crees que en un mercado hay suficientes oferentes para que los precios sean competitivos”.

“En mi opinión, aquí hay muy pocos productores como para que el mercado esté libre. Se están produciendo precios muy altos, y la demostración es que la demanda ha bajado porque los precios son altos. Para un productor eso no importa, porque ellos venden menores cantidades pero a mayor precio. Lo que viene después, sí está regulado”, explicó Celia Martínez-Aparicio.

Desde su perspectiva, si habría un desequilibrio en el sector por haber dejado libres los precios del gas boca de pozo cuando Colombia no tendría las condiciones y se requeriría una regulación, que deberá ser responsable con los productores y que incentive la búsqueda de más combustible.

“Hay que hacer control en la producción, porque la preocupación está en la disminución de la demanda (…) maximizar precios puede llevar a destruir mercados”, expuso el presidente Celia.

Según el ejecutivo barranquillero, el sector gasífero en Colombia ha sido exitoso, una premisa respaldada en los 8 millones 300 mil de usuarios (63% del territorio nacional) y las razones ha sido el dinamismo de la empresa privada, una regulación adecuada y un control correcto, y esquema de subsidios cruzados.

Para el presidente de Promigas, la regulación del sector también debe revisarse porque el negocio del gas así lo requiere, reconoció la labor de la Creg durante los últimos 30 años, pero insistió que es tiempo de revisar y actualizar algunas medidas, porque a su parecer, los expertos tardan mucho en su toma de decisiones.