Video: Esta sería una de las 'casas de pique' que operaban en el Bronx

https://youtu.be/wjVS8fIYdCE
RCN Radio estuvo en las entrañas del Bronx, conocimos los predios que supuestamente eran usados como 'casas de pique', el túnel de tráfico de armas y drogas y hasta centros de rituales satánicos y brujería.

El ingreso a una de la supuestas casas de tortura se hace por unas escaleras blancas enchapadas por baldosas y lo más sórdido en la primera mirada es un rastro de sangre que traza una línea ya color vinotinto hasta el tercer piso.

En las distintas salientes de la escalera hay acceso a piezas de alquiler, destruidas en parte por los operativos del sector, en medio de un olor a excremento humano y animal que se hace cada vez más fuerte.

Al subir al tercer piso se ingresa por un pasillo a la izquierda que conduce a la esquina principal de la llamada 'L', donde el polvo viejo pegado a los vidrios enrarece el ambiente.

Hasta allí llega la mancha de sangre, justo en el lugar donde se ven cuerdas amarradas a la pared y las ventanas, platos de alimento de perros y el olor a excremento se hace casi insoportable, porque centenares de heces aparecen en un salón contiguo sobre el piso de cemento pintado.

Allí supuestamente los hombres a quienes consideraban infiltrados eran torturados hasta la muerte, desmembrados, entregados a los perros y sus restos disueltos en ácido.

El subsecretario de Seguridad, Daniel Mejía, fue prudente al hablar sobre las supuestas casas de pique, pero fue claro en advertir que en el Bronx, a cuatro cuadras del palacio presidencial, se cometían toda clase de atrocidades.

Están haciendo las investigaciones sobre qué ocurría allá, pero lo que es cierto es que "en el Bronx nos encontramos todo lo que usted se imagina que hace parte del infierno".

Enumeró que había "casas de rezos satánicos, lugares de brujería, caletas con armas, caletas con drogas, dos granadas de fragmentación, encontramos un túnel de escape a una bodega que da sobre la carrera 16".

Saliendo de ese sito nos dirigimos al vértice que dibuja el mapa de la 'L', atravesando los andenes llenos de máquinas tragamonedas, el bazuco electrónico, hacia un predio donde funcionaba un bar dedicado a un equipo de fútbol bogotano.

En el descanso de la escalera hay un aviso que informa sobre el costo de las habitaciones. Al girar a la izquierda hay que escoger. Si toma el pasillo de la derecha que da paso a más de 100 cédulas de ciudadanía tiradas en el suelo, al parecer de personas víctimas de suplantación.

Si toma a la izquierda encuentra habitaciones y justo en el cuarto del fondo se deja ver un agujero en el suelo, por donde entraban armas y drogas y salían los capos del Bronx cuando llegaban las autoridades.

La calle del bronx permanecerá ocupada, está vez por la Policía y funcionarios que no terminan aún de sacar sórdidos hallazgos en ese lugar vedado hasta hace unos días.

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