Las plantas de sacrificio de Aranzazu y Victoria son las que corren mayor riesgo de ser cerradas en Caldas
22 Ago 2016 - 10:54 pm
La advertencia la hizo el secretario de Agricultara de este departamento, quien aclaró que esto no quiere decir que no puedan alcanzar las exigencias del 100% para operar normalmente de acuerdo con el INVIMA
El secretario de Agricultura del Departamento, Angelo Quintero Palacios, le dijo a RCN Radio que las 20 plantas para el sacrificio de ganado existentes en Caldas tienen 2 años para cumplir con el decreto 1.500 del INVIMA, pero en el primer año deben llenar como mínimo el 50% de los requerimientos para poder funcionar, de lo contrario algunas de ellas podrían recibir orden de cierre.
Según el funcionario, la garantía para que el INVIMA de el segundo año de plazo para el cumplimiento del 100% de los requisitos, es estar al día con ese 50% en cuanto a las exigencias, porque el cierre de varias plantas traería consigo problemas como el sacrificio clandestino, el abigeato, y dificultades en materia de salud pública.
Al hablar sobre los municipios de Caldas con plantas en claro riesgo de ser cerradas, aseguró que "todos" pueden ser objeto de esa drástica medida. "Aquí el que se descuide le cierran la planta y por consiguiente va a tener dificultades para el suministro y la proveeduría de la carne".
Sin embargo, admitió que Aranzazu tiene un porcentaje de cumplimiento más bajo, pero esto no quiere decir que no esté en condiciones de llegar al 100%; lo puede hacer es simplemente diseñar una buena estrategia que le permita alcanzar en el tiempo las ejecuciones que le quedan faltando. También se refirió a la planta del municipio de Victoria y dijo que es una de las que necesita de un esfuerzo fiscal muy grande del alcalde para ponerla a punto.
El secretario de Agricultura de Caldas expresó finalmente que para llenar los requisitos de la normatividad en mención hay que hacer labores muy sencillas, como delimitar la central de sacrificio, o sea, levantar un cerco perimetral, adelantar unos programas de control de roedoreres, ponerle polisombra a los corrales donde llega el ganado, y lo otro es lo relacionado con la inocuidad: cómo se sacrifica; que sea izado, que los cuchillos y las sierras que se utilizan sean en acero inoxidable y que las mesas donde se deposita el producto cárnico cumplan con los requerimientos del INVIMA.
"Son cosas técnicas fáciles de cumplir que requieren de un esfuerzo fiscal, pero el departamento está acompañando a los alcaldes con los técnicos y el diagnóstico de la problemática de cada planta", destacó el señor Quintero Palacios.