Cargando contenido

Ahora en vivo

Seleccione la señal de su ciudad

El río Cesar agoniza entre los malos olores y las aguas servidas

El Río Cesar No solo ha sido el inspirador de clásicos vallenatos y melodías románticas que se hicieron canción. Foto/Pepe Morón

El río Cesar muere lentamente bajo el fluido constante de las aguas servidas que salen de Valledupar. Las autoridades ambientales de la región no ofrecen soluciones definitivas y los planes de choques se terminaron desde febrero.


Con más de 280 km entre su nacimiento en la Sierra Nevada de Santa Marta y su desembocadura en la Ciénaga de Zapatosa, el río Cesar no solo ha sido el inspirador de clásicos vallenatos y melodías románticas que se hicieron canción sino también en otros tiempos era fundamental en el día a día de los cesarenses y guajiros que vivían en los asentamientos que se crearon en su rivera.


"En otros tiempos en el río habían pescados que uno mismo vendía en el Salguero; de Valledupar y desde La Paz, llegaban a comprar los bocachicos grandes y limpios que salían del río pero ya eso no se da, eso se acabó", cuenta un campesino de la región.


El hombre también aseguró que no hay forma de soportar el mal olor que sale del afluente y explicó que su vivienda tuvo que ser removida porque no podía vivir en medio de "tanta contaminación".


Precisamente a escasos 100 metros del puente Salguero, ubicado entre Valledupar y La Paz, hoy solo hay malos olores, aguas servidas y una espuma blanca que por varios kilómetros mancha el cauce del río.


[gallery size="large" ids="252108,252109,252110,252111,252112"]

Ese punto del río donde cuenta el maestro Jorge Oñate se bañaba una 'sanjuanerita', es obligado a tragarse las aguas negras de Valledupar y todo porque, al parecer, las autoridades del momento pensaron que el daño no sería tan grande.


"Las lagunas de aguas servidas de Valledupar fueron creadas para una ciudad más pequeña y no se tenía en cuenta el daño que se causaba con ella", explicó el director actual de la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, Kalet Villalobos.


Según el director de Corpocesar se intento un tratamiento con bacterias que parecía funcionar pero que desde febrero se dejó de aplicar.


Para los que todos los días pasan por el puente salguero, desde donde es posible ver el punto exacto donde caen las aguas servidas, ya es parte del paisaje ver al río morir.