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Los retos de las Farc en su tránsito a la política tras dejación de armas

La guerrilla Farc completó su desarme en cumplimiento al acuerdo de paz firmado con el gobierno y con el objetivo de hacer política: una transición que no se vislumbra rápida ni fácil en un país que aún los ve con desconfianza.

Foto AFP



La guerrilla Farc completó su desarme en cumplimiento al acuerdo de paz firmado con el gobierno y con el objetivo de hacer política: una transición que no se vislumbra rápida ni fácil en un país que aún los ve con desconfianza.

Los retos para quienes combatieron al Estado con armas por más de medio siglo son muchos y variados, pero, según expertos, uno resulta clave: arrancar con buen pie su conversión a la política.

"El desafío más grande es que ese partido político que nazca tenga acogida entre los demás partidos, de modo que quieran hacer alianzas con ellos, formar coaliciones; pero aún mayor es el de lograr que la gente quiera votar por ellos", aseguró a la AFP la analista política Angelika Rettberg.

"Hay muy mala opinión de las Farc y de su legado histórico y convencer a los colombianos de que han hecho una transición, no solo en sus acciones sino también en su forma de entender la relación Estado-ciudadanos, será un reto importante en los próximos años", explicó esta profesora de la Universidad de Los Andes.

La opinión desfavorable sobre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) era en mayo pasado de 82%, según un estudio de la encuestadora Gallup. Además, 65% consideraba que esa guerrilla "no cumpliría" el pacto de paz sellado tras cuatro años de negociaciones en Cuba.

Cambio de visión

La importancia de crear un partido sólido está clara para muchos de los 7.000 miembros de las Farc que están concentrados en 26 puntos del país mientras se completa su reinserción y que en las próximas semanas recibirán amnistías o pasarán a ser juzgados en tribunales especiales, según los delitos que hayan cometido.

En la zona de concentración de Colinas (sur), un guerrillero leía hace unos días a la luz de una vela los "lineamientos para el congreso fundacional del partido", previsto para agosto. "Hay que estudiar mucho para saber cómo ejercer la política", dijo.

Mauricio Jaramillo, de la cúpula de las Farc, adelantó a AFP que la "lucha contra la corrupción" y "para que se acabe la violencia" estarán entre las banderas del movimiento político, en el que aspira cumplir una labor organizativa: "ingresando gente, formando gente".

El jefe de las Farc, Rodrigo Londoño (Timochenko), aseguró el martes durante el acto de la dejación de armas que "la guerra interna nació del cierre de las vías legales. La paz significa que la participación política estará abierta a todos".

Para el académico Álvaro Villarraga, en su transición las Farc "no solamente pasan de la guerra a la paz, sino a una visión más abierta, más tolerante, para la cual tuvieron un aprendizaje intenso en el desarrollo de la negociación" y que han venido usando en sus discursos, ahora más cercanos y menos agresivos.

"Eso, sin embargo, entra en tensión con un segundo elemento: la concepción marxista-leninista que traen y las prácticas políticas de la clandestinidad. Pero como esto es un proceso, si afinan su discurso, podrán a la larga fortalecerse y ser un factor que aporte a crear una nueva dinámica política en Colombia y particularmente en la izquierda", consideró Villarraga, directivo del Centro de Memoria Histórica.

Por: AFP