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Esmeralderos piden cordura a guaqueros y asistencia del estado por invasión de mina en Boyacá

La mina Puerto Arturo ubicada entre Muzo y Quípama, al Occidente de Boyacá, que además perteneció a Víctor Carranza, fue invadida desde hace cerca de 8 días por una multitud de personas conocidas como "Guaqueros" o "Barequeros".

Una nueva veta de esmeraldas, se habría descubierto en un corte llamado “Mata de Fique” de la mina de propiedad de Minería Texas Colombia S.A. Esta empresa habría alcanzado a sacar a penas una pequeña porción de la valiosa producción, cuando los llamados “Guaqueros” , barequeros o trabajadores informales, se tomaron el lugar armados con palas, picas, explosivos, fusiles y pistolas.
Líderes esmeralderos de Boyacá, expresaron su preocupación por las dificultades de orden público que se ha presentado por la invasión.

En diálogo con RCN La Radio, Henry Candela, Líder de la Mina `Peñas Blancas´ , de San Pablo de Bobur, pidió cordura a los invasores.

Si hay un titular y no respetamos esas concesiones, estamos retrocediendo 50 años atrás, a organizar de manera delincuencial la gente para entrar a las propiedades privadas a usurpar lo que el estado en derecho le ha otorgado a alguien. Y entonces eso ya no es necesidad, esto ya es ´Pillismo` o bandalismo”.

Dijo que la crisis radica en que “No hay esmeraldas para todo el mundo. La oferta de trabajo es muy poca para poder generar el empleo que necesitan miles de personas. Pero no se puede, con el pretexto de la necesidad, rompen las reglas y saquear lo que no es de ellos. Eso a veces es incitado por pocos delincuentes, y los buenos, que son más, no pueden seguirles el juego”.

Envió un mensaje a las personas que aún ´rasguñan la tierra` , arriesgando sus vidas, en busca de “La Guaca”, o de una buena piedra verde. “Decirles que actuemos con prudencia, todo se pude lograr a través del dialogo, si hay que pedir el rebusque, puede hacerse a través de asociaciones. Si eso es de alguna concesión, se debe respetar. Si no hay consenso, el estado tendrá que reubicar la multitud, para que el trabajo minero sea formalizado y no se desaten desordenes de orden público”.

Contrario a lo que dicen Los “Guaqueros”, que condenan la presencia de extranjeros explotando la tierra, el esmeraldero rescató que la industrialización traída por inversión extranjera es positiva e hizo un llamado al ahorro y al cambio cultural en la zona.

Antes de la industrialización, las condiciones eran infrahumanas para entrar a un corte o túnel. Con la industrialización, se adaptan los tuéneles para poder entrar, con buen oxigeno, tratamiento de aguas, ahora se pagan sueldos administrativos, mano de obra no calificada, entonces eso no es malo, porque hay más garantías”. Mencionó el líder esmeraldero.

Igualmente, reclamó atención urgente por el estado, debido a que la crisis es la respuesta a un pueblo olvidado y desinformado por las autoridades competentes.

Que el gobierno no se haga el de la vista gorda, y empiece a contar la verdad, sobre cuáles son los derechos barequeros, que son los derechos empresariales, hasta donde vamos con las cargas y con las tierras, que pueden hacer todos los actores del estado para que no se lesionen ni los derechos de los empresarios, ni los del pueblo barequero o comerciante”.

Insistió en que hay que ser justos con lo que realmente sucede en el sector. “Aquí cabemos todos, en determinado escalón pero cabemos. El cuento de que nos quitan y que se llevan lo nuestro, pues ya no es un argumento de peso. Hay que ser justos con lo que se está invirtiendo”.

Dijo que también es justo, llamar a un cambio cultural por parte de los mineros de la regiónEn la época de las vacas gordas, los Guaqueros tradicionales, generalmente no tienen la costumbre del ahorro, gastan cuanto hay a cuenta de las esmeraldas, y cuando se acaba empieza la crisis. Así no puede ser, cuando tengamos “La Guaca”, o cuando nos la encontremos, la idea es venderla bien, e invertir el dinero en el campo, no ponerla en el bolsillo para gastos, porque ahí viene el suplicio de la miseria”.

El Hijo del “Patriarca de las Esmeraldas” habla de la vanguardia del sector como salida a la crisis

Wilson Alexander Quintero, hijo del llamado “Patriarca de las Esmeraldas” en el oriente de Boyacá y Cundinamarca, Víctor Manuel Quintero, insistió en que es fundamental asociar a los trabajadores para que su sustento no sólo sea la extracción de las esmeraldas.

Hay que ir de la parte agrícola y ganadera en esta sesión del país. Hay que hacerlo por evolución social, porque la esmeralda es un bien no renovable y va a llegar el momento en que se van a agotar, y esas zonas tienen que estar preparadas para seguirse manteniendo de otros sectores productivos, distintos a las esmeraldas. Entonces las salidas son las asociaciones en estos sectores, agrupaciones para el desarrollo”. Afirmó Quintero.

Y elevó una petición al estado para que prepare a las generaciones de la zona esmeraldera, con el objetivo de generar desarrollo en ese sector.

Todavía hay muchas zonas por descubrir y trabajar, al esmeralda también está por redescubrirse en otras zonas, y esperamos que estos mineros, estén preparados para ello, y que no repliquen el sufrimiento que nosotros hemos pasado. Esta es la tarea del gobierno en temas de minería, la de no dejarle a un pueblo las mismas desgracias”. Expuso el esmeraldero.

Agregó que no por cuenta de crisis como esta, que resultan de un abandono estatal, también impactan en señalamientos al gremio esmeralderoHemos tenido mucha estigmatización por ser esmeralderos. En Colombia se nos cierran las puertas mucho por el hecho de decir que ese es nuestro oficio. Los bancos, la fuerza pública etc, nos ven con prejuicio. Queremos decirle a los colombianos, que no somos bandidos, que ser esmeraldero no significa ser un delincuente o un peligro, tal como nos han segregado en la sociedad colombiana. Pero eso no pasa en el exterior, allí es todo lo contrario, y nos reconocen como gente trabajadora, es hora de des satanizar nuestro gremio, enlodado por unos pocos”.

Los líderes esmeralderos concluyeron que no es suficiente redoblar el pie de fuerza en la zona, sino implementar políticas mineras entendibles y educación para superar el conflicto social que no es nuevo en la región, pero que sigue dejando víctimas y estancando a la región.