Corte ordenó restitución de tierras a víctimas en Turbo, Antioquia

Siete de las 21 familias desplazadas de la hacienda Las Guacamayas de Turbo hace 22 años, recuperarán sus tierras mediante la sentencia de la Corte Suprema de Justicia que reconoció que en ese territorio del Urabá antioqueño los campesinos fueron víctimas de violencia generalizada.
 
Tras una batalla jurídica liderada por la fundación Forjando Futuros desde el 2008, la Corte ordenó la restitución jurídica y material de los bienes que se encuentran en manos de la empresa Inmobiliaria e Inversiones ASA S.A, de propiedad de Humberto Duque y de los ganaderos, Jaime Uribe, Arley Muñoz y Francisco Castaño. 
 
Entre los años 1996 y 1997, miembros del frente Arlex Hurtado de las Autodefensas, cometieron varios homicidios y masacres, situación que aprovecharon algunos empresarios para comprar los predios a bajos precios a las familias que se vieron obligadas al destierro para proteger sus vidas.

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Gerardo Vega Medina, presidente de Forjando Futuros, destacó el fallo judicial que crea un precedente a favor de las víctimas del despojo de tierras en todo el país.
 
“Fueron desplazadas de esa región por la presencia y los asesinatos cometidos en esa época, cuando tenía pleno dominio el frente Arlex Hurtado que dirigía Raúl Hasbún comandante de las Autodefensas en Urabá”.
 
Reiteró que “sin querer habían ocasionado desplazamientos, no reconocieron el despojo de tierras y hoy la Corte Suprema de Justicia reconoce que sí lo hubo”.

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Vega Medina recordó que en la lucha por recuperar sus tierras, han sido asesinados 22 líderes en la región del Urabá, y por ello exigió al Estado garantías de seguridad para los sobrevivientes del conflicto que buscan la restitución de sus predios y devolver a las familias lo que perdieron en medio del conflicto.