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Berlín quiere refundar su amistad con EE.UU. sobre unos "fundamentos sinceros"

El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, abogó hoy por refundar las relaciones con EE.UU. sobre unos "fundamentos sinceros", tras destaparse en una semana las actividades de dos supuestos espías de Washington en su país.

"Queremos revivir desde unos fundamentos sinceros nuestra asociación, nuestra amistad", aseguró en una breve declaración el jefe de la diplomacia alemana.

A su juicio, la expulsión del jefe de los servicios secretos de la embajada de EE.UU. en Berlín, decidida ayer, era un "paso necesario" tras las informaciones aparecidas en los últimos días.

La fiscalía alemana arrestó el miércoles de la semana anterior a un espía alemán acusado de trabajar como agente doble para Washington y el pasado miércoles se interrogó a un militar alemán destacado en el Ministerio de Defensa del que se sospecha que filtró información a los norteamericanos.

El ministro de Exteriores recalcó que las relaciones bilaterales deben basarse en "la confianza y el respeto mutuo", pero agregó que la alianza de Alemania con EE.UU. es "irrenunciable".

Se prevé que Steinmeier abordará esta crisis bilateral con su homólogo estadounidense, el secretario de Estado John Kerry, este fin de semana durante las negociaciones nucleares con Irán, que se celebran en Viena.

Oficialmente no hay en la agenda de la reunión un encuentro bilateral entre ambos ministros, aunque "se da por hecho" que va a tener lugar ese contacto, indicaron fuentes del ministerio de Exteriores.

El gobierno alemán insistió hoy en la voluntad de mantener la cooperación en materia de seguridad con su gran aliado transatlántico.

"Nuestras relaciones bilaterales están basadas en fundamentos más amplios que las meras relaciones entre nuestros servicios secretos", indicó el portavoz del Gobierno, Steffen Seibert, en relación con el disenso que derivó ayer en la decisión de apremiar al jefe de la CIA de la embajada de Berlín a dejar el país.

Formalmente, añadió Seibert, no se trata de una "expulsión", aunque en el ámbito diplomático se "da por sobreentendido" que a una "petición" de este tipo debe seguirle el abandono del país "en un breve espacio de tiempo" del aludido.

El portavoz desestimó explicar en qué margen temporal iba a producirse tal relevo, cómo se resolverá la vacante o cómo será su salida efectiva del país, con el argumento de que eso corresponde establecerlo a EE.UU.

Sí insistió Seibert, en cambio, en que tanto por parte de Berlín como de Washington hay una voluntad compartida de no "restringir" o dejar en mínimos la cooperación entre los respectivos servicios secretos

El portavoz salió al paso así unas informaciones del diario sensacionalista "Bild", según las cuales Alemania pretendía limitar a lo imprescindible la colaboración con la inteligencia de EEUU.

"No existen tales instrucciones", zanjó Seibert, aunque añadió que no le correspondía a él dar informaciones sobre el "trabajo operativo" del espionaje alemán.