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En Facatativá habitaron aborígenes hace tres mil años

Desde hace un mes, un grupo de expertos de la Universidad Nacional y de restauradores realizan en el parque de las Piedras del Tunjo o Parque Arqueológico de Facatativá trabajos arqueológicos y de intervención del arte rupestre que han permitido descubrir material cerámico y óseo, con unos 3.000 años de antigüedad y del período Herrera, además de nuevas pictografías.

En medio de grandes piedras que datan de hace más de 65 millones de años, un grupo de arqueólogos ha hecho excavaciones (o prospecciones como ellos las llaman) bajo los abrigos rocosos que son lugares donde se presume eran utilizados por cazadores-recolectores como vivienda y refugio, en busca de elementos que brinden información sobre las comunidades que hace miles de años vivieron en este lugar de Cundinamarca.

RCN La Radio visitó el sitio donde se realizan las labores de excavación. Allí en un hueco,que los científicos llaman pozo, de 4 metros por 4, encontramos varios profesionales limpiando cuidadosamente el piso de tierra.

La arqueóloga Amparo Ariza asegura que se hizo una prospección en 1.002 pozos de sondeo que fueron la guía inicial para que luego de tres cortes arqueológicos se descubriera en el pozo que observamos, material cerámico del período Herrera (800 a. C. y 800 d. C.), así como artefactos líticos precerámicos.

Otro corte, dice la experta, señala que hubo ocupaciones más antiguas, desde los cazadores-recolectores (Precerámico tardío) hasta el período Herrera, en un intervalo de 3.000 años.

Ariza subraya que la importancia de este hallazgo es que muestra una secuencia de ocupaciones profundas que señalan que el sitio fue habitado antes de los Muiscas y que evidencian presencia doméstica en una zona en la que se adecuaron los suelos con piedras compactadas para no resbalar.

Además de estos trabajos arqueológicos, se adelanta en el Parque de Los Tunjos una intervención a las pinturas rupestres que están deterioradas debido a la salinización de las piedras, los excrementos de aves y los grafitis realizados por inescrupulosos que las han dañado u ocultado durante años.

María Paola Alvarez, coordinadora del grupo de conservación dice que el proyecto nació por una acción popular que los habitantes de Facatativá, quienes se interpusieron ante la CAR exigiendo que se hiciera una limpieza de las pictografías en mal estado y prácticamente abandonadas por el Estado.

"Estamos haciendo la intervención de más de mil metros cuadrados de superficies de piedra y se ha adelantado el 90% del trabajo de mantenimiento de las figuras en 47 piedras del Parque. Es el proyecto más grande de conservación de arte rupestre que se ha hecho en Colombia", advierte la restauradora.

Además de estas reliquias rupestres de la antigüedad, se está restaurando la obra de los presidentes, hecha en 1915 en una de las piedras la cual es protegida por la Ley de Patrimonio, por ser anterior a 1920. Esta obra perpetúa los rostros de mandatarios, entre ellos los de Francisco de Paula Santander y Rafael Uribe Uribe.

Sin embargo, este proyecto de conservación de las pictografías, contextualización arqueológica y divulgación para revelar la importancia del patrimonio colombiano, podría quedar a medias por cuanto el contrato, realizado entre la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) y la Universidad Nacional, terminará el próximo mes de septiembre y se requieren más recursos para continuar esta labor científica.