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Habitantes de La Calera protestan por posible contaminación de embalse San Rafael

Veedores ciudadanos de La Calera denuncian que la instalación de una bomba de gasolina en nacimiento de agua, podría contaminar el embalse San Rafael, el cual es el principal proveedor del líquido.

La vocera de la Veeduría Ambiental La Calera, Herminia Cristancho, dijo que el Embalse de San Rafael (Planta de tratamiento Francisco Wiesner), el cual surte de agua a los bogotanos y a los calerunos, podría ser contaminado con gasolina.

Por esa razón este domingo, los habitantes adelantan un cacerolazo en el kilómetro 17 de la vía que comunica a Bogotá con La Calera, en un intento para que la obra no continúe.

Según la denuncia, la Alcaldía de La Calera autorizó a la Multinacional Gulf, la construcción de la estación de servicio “El Manantial”, en un predio que al momento de expedir la licencia era reserva forestal y en el cual hay nacimientos de agua, ubicado frente al embalse.

Los manifestantes enviaron a la Alcaldía de La Calera un derecho de oposición, donde solicitaron la revocatoria de la licencia y se envió la advertencia a todos los entes competentes y de control.

Alcaldía de La Calera responde

Ante los hechos, la alcaldía de La Calera expidió un comunicado en el que resalta que “en la actualidad cursa proceso ante la Jurisdicción Contenciosa Administrativa, iniciado por este ente territorial, a fin de que se declare la nulidad de la Resolución No. 124 del acto Administrativo expedido por la Secretaria de Planeación y que corresponde a la Licencia No. 116 del 27 de Junio de 2013”.

El alcalde Álvaro Venegas, se declaró a la espera del proceso que “cursa en el Juzgado 5 Administrativo de la oralidad en la ciudad de Bogotá”.

Sin embargo, el mismo comunicado concluye más adelante que “Autoridades como el Ministerio del Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible y la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), han manifestado su posición reciente frente a la zona en la que se construye la estación de servicio, señalando que el predio ya no hace parte de la Reserva Forestal Protectora Productora de la Cuenca Alta del Río Bogotá y que el nacimiento hídrico que se había establecido en primera instancia, ya no es considerado como tal”.