Hay "mano negra" para impedir la justicia: Hijo de víctima del atentado a avión de Avianca

Este jueves se cumplen los 25 años de la explosión del vuelo 203 de Avianca, que despegó de Bogotá rumbo a Cali, según los archivos de audio de RCN La Radio, a las 7:13 de la mañana, y siete minutos después ocurrió la tragedia. Fue el lunes 27 de noviembre de 1989.

"Desafortunadmente tenemos un sistema judicial paquidérmico y con trabas. Ahí debe haber una verdadera mano negra que no permita que esto avance, máxime cuando hay tantas pruebas, cuando hay quienes se autoincriminan como 'Popeye' y es absurdo que no se haya abierto investigación por esto", sostuvo Arellano.

Demanda internacional

Por eso, la Fundación, que reúne a familiares de las 107 víctimas del atentado, interpondrá una demanda ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, reclamando la reparación integral del Estado colombiano.

"No sólo es que Pablo Escobar se murió y ya; no, él consiguió gente que le ayudara y cofinanció el atentado. Hay personas del sector privado y del político que tienen que rendir cuentas", agregó el presidente de la Fundación.

Su padre, Gerardo Arellano, era un tenor de la Ópera de Colombia y reconocido artista por su compromiso con la difusión de la música lírica.

"Tenía 12 años cuando ocurrió el atentado. Me preparaba para el colegio y noté un movimiento especialmente extraño, mi mamá alterada (…) La primera hipótesis era que se había accidentado un avión, pero luego nos dimos cuenta de que habían perpetrado un atentado. Fue terriblemente doloroso (…) Para mí, mi padre no era mi padre, sino mi superhéroe por los valores que me inculcó", relató Federico Arellano.

Él, como abogado de su familia y de otras de las víctimas, seguirá exigiendo justicia, verdad y reparación frente a un episodio del narcoterrorismo que aún no se ha resuelto.