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Pinto resulto bandido

Tras la confirmada salida de Jorge Luis Pinto, al frente de la selección de Costa Rica, se han originado una serie de declaraciones que sobrecogen a cualquiera. Ponen a dudar quien las lea.

Paulo Cesar Wanchope, uno de los sindicados de traidor por Pinto:"Por qué no tuvo los tamaños y me dijo de frente. Para que va a una rueda de prensa, a hacer expresiones que dañan la imagen mía, del fútbol tico, y a los jugadores".

Bryan Ruiz, jugador estrella de la selección:"Espero que la federación haya acertado. Hubo mucho desgaste en la relación de Pinto con sus demás compañeros del cuerpo técnico y con los jugadores, además quería controlar absolutamente todo. Seguimos adelante".

Eduardo Li, presidente de la Federación, un poco más cauto."Debemos entender que altero mucho la convivencia por el largo tiempo y la exigencia que el ponía en cada trabajo. Yo siento que se ha perdido una gran ocasión de seguir el proceso".
Joel Campbell, una gran promesa del fútbol mundial:"Ojala alguien hubiera visto la forma en que nos derretíamos en el sitio de trabajo del proyecto Goal en San José. Lo que ocurre es que nadie se quejo porque teníamos en mente un sueno y objetivo"
Luis Gabelo Conejo, preparador de arqueros y ex mundialista en Italia 90:"Los métodos de Pinto eran muy exigentes y seguramente nadie le protesto, o quien le protesto tuvo dificultades posteriormente".

Y alguno más llego a confesar que Pinto les exigía a los futbolistas como si fueran sus empleados. No les dio ocasión de alegar los métodos, era imposible. Fue terco y exageradamente disciplinado.
Tras su salida, y luego de la rueda de prensa en la que Jorge Luis, dijo que le toco dormir con su enemigo año y medio, pues no queda más camino que poner una balanza.


A quien se le cree? a los Futbolistas, a los Dirigentes, al Técnico, a sus ex-compañeros.

Lo único verdadero y cierto es que el Santandereano dio el paso al costado, acosado por algunos medios y ex entrenadores. Lo mismo le había acontecido unos años atrás, cuando Alexander Guimaraes, en ese momento comentarista, fustigo a las espaldas, para quedarse con el cargo.

Jorge Luis Pinto, termino una etapa de amor y odio en Costa Rica. Se fue por tercera ocasión del país. Susurra Wanchope que con todo el dinero que le dieron ellos. Y dice el pueblo que se fue el que por fin los hizo sonreír en un campeonato de fútbol mundial, donde no dieron vergüenza ni pesar.