Por un pan y una gaseosa inició su carrera la primera árbitra en Colombia
Un pan y una gaseosa que le daba el profesor de Educación Física era la motivación de Martha Liliana Toro Pardo para pitar los partidos en su colegio. Nunca pensó que lo que inició en un juego se convertiría en un oficio que la llevó a ser la primera árbitra en Colombia y la primera mujer en pitar un partido en Suramérica. “El profe nos daba una gaseosa con un pan o dos panes y yo quedaba feliz”
26 Nov 2014 - 06:06 am
“De no haber sido por el arbitraje de pronto nunca hubiera montado en un avión”, asegura Martha Liliana Toro Pardo. Lo dice cuando recuerda la primera vez en la que recibió una invitación formal por parte de la Federación Colombiana de Fútbol.
La primera árbitra de Colombia con orgullo recuerda que en su época estudiantil nunca le dieron merienda y que al colegio debía ir caminando y regresar a casa de la misma manera. “¿Se acuerda que a uno en esa época no le daban merienda? Eso es ahora que los muchachitos dicen ‘si no hay merienda no voy al colegio’. ¡Figúrate!”
En el desarrollo del Primer Campeonato Nacional de Fútbol Femenino en Colombia realizado en Medellín, a Martha Liliana Toro la invitaron a pitar uno de los partidos. En la gradería estaba quien luego impulsó su carrera. “Yo siempre he dicho que lo que es pa´ uno es pa´ uno y si está frio le calienta. Salgo al terreno de juego y estaba don Álvaro González Alzate -Presidente de la División Aficionada del Fútbol Colombiano, Difútbol-
La primera árbitra en Colombia y la primera en Suramérica en pitar un partido de hombres en primera división, le da todos los méritos de su carrera a Siervo Saúl Quiñones, su profesor de Educación Física del colegio Prudencia Daza de Valledupar. “Yo estoy muy agradecida con mi profesor porque todos esos años en el colegio me sirvieron para ir amoldando el temperamento”.
Actualmente esta mujer labora en una institución educativa de la capital del Cesar.