Queremos saber qué pasó: familiar de dos de las 15 víctimas de la masacre de Los Guaimaros

Mirar 14 años atrás y recordar cómo fue el perder a su padre y a su hermano, todavía remueve las fibras del corazón de Jose Luis Contreras.

Este hombre, hoy convertido en líder de los habitantes del corregimiento de Corralito en San Juan Nepomuceno, relató a RCN Radio cómo fue aquel suceso que cambió su vida, la de su familia y la de decenas de hogares tras la masacre ocurrida en la finca Los Guáimaros, donde hombres armados asesinaron a sangre fría a 15 campesinos.

"Mi hermano trabajaba como trabajador de la finca Los Guáimaros y ese día fue en compañía de cuatro trabajadores más a la finca, el día viernes 30 de agosto del 2002 y ese día no regresaron a la noche como era de costumbre", expresó.

En el caso de la muerte de su padre, con quien comparte el mismo nombre, manifestó que éste tras enterarse del suceso, se organizó con varios pobladores para ir a buscar los cuerpos, sin embargo, ni este ni los acompañantes regresaron sanos ni salvo.

"Fueron siete personas con mi papá en un carro el día 31 de agosto a buscar el cuerpo de mi hermano y de los demás trabajadores y no regresó y el miércoles 4 de septiembre fue que se pudieron recuperar los cuerpos", señaló.

Para Contreras, además del dolor por la partida de sus seres queridos, el sentimiento que permanece es que tras varios años, aún siguen sin saber qué pasó, no sólo cuando fue asesinado su hermano Francisco en la finca, sino cuándo su padre fue al rescate del cuerpo.

"Queremos haber con la Fiscalía qué noticias nos dan, cuál es la verdad de los sucedido, pues para recuperar los cuerpos se demoraron entre cuatro y cinco días", apuntó.

Indicó que el temor que germinó en la comunidad tras la masacre, llevó a que esta por mucho tiempo, guardara silencio.

"El temor lo ha habido y siempre lo habrá porque cuando uno pierde a un ser querido el sentimiento de miedo es totalmente diferente a que cuando uno no pierde un ser querido y en ese tiempo y después de mucho tiempo, después de haber pasado el hecho, el miedo siguió por temor a hablar", dijo.

Sin embargo, la comunidad tras 14 años de mantener ese dolor oculto, hoy los familiares de las 15 víctimas de la masacre de Los Guáimaros, no descansarán hasta que se conozca la verdad sobre el crimen  y que los responsables respondan.

"Fueron quince familias a las que las unió el dolor por decirlo así, pero gracias a Dios y después de 14 años, esperemos que todo salga a la luz y que por fin haya justicia. Queremos justicia y paz, principalmente en nuestros corazones", puntualizó.

Con una ceremonia litúrgica, un foro sobre verdad, justicia y reparación y una presentación de una ofrenda floral, entre hoy y mañana, en San Juan Nepomuceno, se rendirá homenaje a los hombres cuyas vidas fueron arrebatas, en el marco de un conflicto, el cual hoy está muy cerca de llegar a su final.