Cargando contenido

Ahora en vivo

Seleccione la señal de su ciudad

Responsabilidad no es sólo de la Canciller, dicen partidos políticos tras fallo de la CIJ

Así lo indicaron el presidente del Partido Liberal, Simón Gaviria; el senador Juan Lozano, del Partido de la U, y Clara López, presidenta del Polo Democrático, al referirse al fallo proferido por la Corte Internacional de Justicia (CIJ) sobre el diferendo marítimo de Colombia con Nicaragua.

Entre tanto, el presidente del Partido Liberal, Simón Gaviria; el senador Juan Lozano, del Partido de la U, y Clara López, presidenta del Polo Democrático, coincidieron en señalar que la responsabilidad en el tema no es sólo de la Canciller.

Para la Presidenta del Polo Democrático, partido de oposición, tiene que existir una responsabilidad política por el descalabro en La Haya. Advirtió que este fallo es el resultado de “una acumulación de errores por la ineptitud de varios gobiernos”.

A su vez, López Obregón anotó que, aunque el fallo de la Corte Internacional de Justicia es inapelable y es un “un baldado de agua fría”, se pueden explorar caminos jurídicos para reparar a los afectados, que son los pescadores de San Andrés.

La Presidenta del Polo Democrático fue clara en afirmar que deben existir responsabilidades políticas, aunque no culpó de manera directa a la canciller María Ángela Holguín. "Seguramente a la canciller la van a sacrificar, pero ella no es la culpable de una acumulación de errores (…) Si paga la canciller, tienen que pagar todos”.

Por su parte el Jefe único del Liberalismo, Simón Gaviria, afirmó que a pesar que los comentarios de la canciller María Ángela Holguín fueron equivocados, pero “seguramente no fueron influyentes en la decisión de la Corte y no se le puede dar la responsabilidad total”.

Gaviria señaló que uno de los errores del Gobierno colombiano fue aceptar la competencia de la Corte y someterse a ella “es como si usted acepta a un árbitro en un partido de fútbol y le pitan un penalti, hay que aceptarlo por someterse a sus decisiones”.

Por su parte, Juan Lozano, miembro de la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores y senador del partido de la U, señaló que lo que hay que hacer es “abrazar a San Andrés que está llorando (…) Debemos examinar la demanda de interpretación y la situación de los pescadores, es un dolor de patria muy grande".

La CIJ remodeló la frontera marítima entre Nicaragua y Colombia, a la que reconoció la soberanía sobre el archipiélago de San Andrés, un fallo que para Managua también supone salir del límite que le marcaba el meridiano 82.

La resolución, que es inapelable, está lejos del reclamo inicial presentado por Nicaragua y en el que pedía que su frontera marítima con Colombia se desplazara al Este hasta casi tocar la costa de ese país, aunque en la práctica Managua gana más terreno en el Mar Caribe del que tenía hasta ahora, en detrimento de Colombia.

"La Corte considera que se ha conseguido un resultado equitativo continuando la línea de delimitación de los paralelos hasta la latitud de 200 millas náuticas desde la costa de Nicaragua", leyó en el fallo del alto tribunal su presidente, Peter Tomka.

Con la nueva delimitación, que confirma la soberanía de Colombia sobre las islas y los cayos del archipiélago de San Andrés, la Corte rechazó traspasar al Este, más allá de la isla Roncador, la frontera que hasta hoy establecía el meridiano 82.

El máximo órgano judicial de la ONU fijó un trazado en el que Nicaragua gana terreno al norte de las islas de Roncador y Providencia y al sur de los cayos de Alburquerque y Este Sudeste.

En ese espacio al norte de Roncador y Providencia, los cayos de Quitasueño y Serrana quedan "enclavados" en un área de 12 millas náuticas que pertenecen a Colombia.

Según la decisión de los jueces, se traza una circunferencia de 12 millas en torno a los dos cayos, y el resto del mar, con la frontera de Honduras al norte y sin superar las 200 millas al este, la zona pasa a pertenecer a Nicaragua.

La Corte subrayó que con su decisión se mantienen las líneas fronterizas de Nicaragua con terceros países como Honduras y Costa Rica, a la vez que respeta los acuerdos bilaterales de Colombia con Jamaica, Panamá y Costa Rica.