Cargando contenido

Ahora en vivo

Seleccione la señal de su ciudad

Rusia, Ucrania y la UE alcanzan acuerdo sobre suministro de gas

Los ministros de Energía ucraniano y ruso así como los responsables de la Unión Europea (UE) alcanzaron este jueves por la noche en Bruselas un acuerdo para el suministro de gas a Ucrania hasta marzo con un precio garantizado y el pago de su deuda con Gazprom.

"Prevaleció la responsabilidad política, la lógica de cooperación y el simple buen sentido económico", dijo el presidente de la Comisión, José Manuel Barroso, en una rueda de prensa tras la firma del protocolo acordado.

El acuerdo, por un total de 4.600 millones de dólares, supone el pago de aquí a fin de año por Kiev de una factura adeudada a Gazprom por el suministro de gas entre septiembre de 2013 y junio de 2014 por un monto de 3.100 millones.

También estipula que Rusia le suministrará el fluido a su vecino a un precio por debajo de 385 dólares los 1.000 m3, "lo que incluye una reducción de 100 dólares", señaló Novak. Este precio regirá entre noviembre y marzo.

Ucrania necesita para los próximos meses unos 4.000 millones de m3. Kiev quería la garantía de que el precio no cambiaría mientras dure el contrato, y la obtuvo. El pago se hará por adelantado para el mes siguiente.

"Ucrania puede pagar" estos montos, dijo por su parte el comisario europeo de Energía, Gunther Oettinger.

Para Gazprom, la factura impaga de Kiev asciende a 5.300 millones. Según este acuerdo, los rusos aceptan que Ucrania pague 3.100 millones y que el resto sea dirimido por un tribunal arbitral en Estocolmo.

"Estamos convencidos de que nuestra futura relación será constructiva y que se cumplirán los acuerdos", dijo Novak por su parte.

Niguna de las partes hizo referencia a un acuerdo sobre el suministro de gas una vez terminado el "paquete para el invierno", es decir marzo.

Duras negociaciones

La última ronda de negociaciones había comenzado el miércoles en Bruselas y duró hasta la madrugada del jueves, cuando ambas partes se separaron sin hallar un acuerdo.

Se reanudó luego el jueves por la tarde, tras el regreso a Bruselas de la delegación rusa.

"Las negociaciones fueron duras", dijo Oettinger. El comisario europeo, que "actuó como moderador", inició los contactos con la parte rusa y la ucraniana en mayo, tres meses después de que fuera depuesto el presidente ucraniano Viktor Yanukovich.

"La idea era testificar del curso y el resultado de estas negociaciones", indicó. Así como asegurar que llegue a Europa el gas que le compra a Rusia, su principal proveedor y del cual un tercio transita por Ucrania.

La UE buscaba evitar que se repitiera la crisis de 2006 y de 2009 cuando Rusia cerró el grifo a Ucrania y se alteró el suministro de gas Europa durante dos inviernos muy fríos.

Rusia cortó el gas a Ucrania en junio por la deuda impaga y luego de que Kiev se negara a pagar el precio que Moscú reclamó cuando llegó al poder al país un gobierno proeuropeo.

El gas no amaina la crisis

El acuerdo alcanzado fue celebrado con optimismo por Barroso y Oettinger esperando que aplaque los otros aspectos de la crisis, pero no hubieron signos de eso esta semana.

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, delcaró que la Alianza se mantiene "vigilante" luego de que se registrara el martes y miércoles una "inusual" actividad aérea militar rusa en las inmediaciones del espacio aéreo de Europa.

En respuesta, la OTAN hizo despegar numerosos aviones de sus aliados para interceptar a las flotillas aéreas rusas.

Las autoridades ucranianas indicaron por su parte que los rebeldes prorrusos mataron a siete soldados leales a Kiev el jueves, el balance más importante en dos semanas.

El conflicto militar en Ucrania dejó desde que comenzó tras la anexión de Crimea en abril unos 3.700 muertos. Desde que se pactó un alto al fuego a principios de diciembre unas 160 personas murieron.

La UE impuso sanciones progresivas contra Rusia, a quien acusa de azuzar la crisis en Ucrania, de enviar tropas y de desestabilizar a su vecino.

Esta semana los Estados miembros de la UE decidieron mantener las sanciones contra Rusia y el miércoles condenaron la intención de Moscú de reconocer el resultado de las próximas elecciones en las repúblicas autoproclamadas de Donetsk y Lugansk, en el este de Ucrania.