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Santos aceptó renuncia del general Rubén Darío Alzate, quien pidió la baja en su servicio

El presidente Juan Manuel Santos aseguró que aceptó la dimisión del alto oficial, general Rubén Darío Alzate, quien en la noche de este lunes pidió la baja de su servicio como militar de las Fuerzas Armadas, tras el episodio donde fue secuestrado y posteriormente liberado por las Farc

A la pregunta puntual sobre si le aceptó la renuncia o la baja al general Alzate, el mandatario contestó con un escueto “sí”, posteriormente agregó que la salida del militar se hizo en buenos términos

”El General salió como un buen militar, salió con el honor militar”, puntualizó el jefe de Estado.

El Presidente de la República se negó a responder otras preguntas y dejó entrever que había quedado satisfecho con la explicación del general Rubén Darío Alzate.

Horas antes el Brigadier General, Rubén Darío Alzate, anunció que había pedido al Gobierno Nacional su retiro del servicio activo en las Fuerzas Militares, argumentando que lo hacía por su honor militar, ya que la ”imagen del Ejército se vio afectada” tras el incidente en el que resultó plagiado por la guerrilla.

”Por mi honor militar como primera virtud del soldado que he respetado con más de 33 años de entrega y por el amor y respeto a nuestra institución militar, que por este hecho se ha visto afectada, he solicitado al Gobierno Nacional mi retiro del servicio activo”, dijo el General.

El anuncio lo hizo en rueda de prensa ante los medios de comunicación después de que el Gobierno se lo solicitara; el General Alzate entregó detalles sobre su secuestro por parte de las Farc y aseguró que su retención se produjo cuando realizaba labores de acercamiento con las comunidades del Chocó.

Alzate dijo que “la natural prevención y la falta de confianza de algunas comunidades de este departamento, nos llevó a plantear nuevas estrategias de aproximación a ellas”

Agregó que visitó el corregimiento de las Mercedes ”adoptando unas medidas de seguridad que incluía desinformación de mi ruta y destino final, el no acompañamiento de mi anillo de seguridad y el manejo de un bajo perfil, razón por la que iba vestido de civil y sin armamento”.

El General enfatizó en que adicional al bajo perfil, usó vestido de civil ”para fortalecer la confianza con la comunidad”.

Dijo que ordenó que el bote que lo trasladaba a él, al cabo Rodríguez y a la abogada Urrego, hasta el Corregimiento de Las Mercedes, se devolviera ya que un perro que viajaba con ellos ”saltó del bote y asustó a un grupo de niño que se encontraba delante del muelle”.

Según su declaración, posteriormente, cuando caminaban hacía la comunidad sorpresivamente fueron abordados por cuatro hombres armados de fusil, entre quienes se encontraba alias "Chaverra" del frente 34 de las Farc, quienes lo secuestraron ”en total estado de indefensión”.

Agregó que este hecho constituye una flagrante violación a los Derechos Humanos y por consiguiente se configura como una infracción al Derecho Internacional Humanitario.

“Durante los 14 días que duró nuestros secuestro fui esposado y posteriormente amarrado durante las noches, al igual que cabo Rodríguez, nos vimos forzados por estos guerrilleros a realizar caminatas durante más de ocho horas diarias a través de la selva”, señaló el oficial.

El General igualmente calificó como un show mediático” de la guerrilla el hecho de que haya sido fotografiado al lado del jefe guerrillero alias “Pastor Alape” durante el procedimiento de su liberación.

Álzate reconoció que su afán de servicio y el amor por el pueblo chocoano, lo llevó a no aplicar los procedimientos que en materia de seguridad debía adoptar en su desplazamiento, en materia de seguridad como comandante de la Fuerza de Tarea Titán.

Finalmente el General agradeció a Dios ”el haberme permitido portar con orgullo y dignidad el uniforme de soldado colombiano”.