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Una abuela desahuciada en España recibe numerosos gestos de solidaridad

El caso de Carmen Martínez Ayuso, de 85 años y expulsada el 21 de noviembre de su casa en Madrid, ha despertado el interés de los españoles, y muchas personas e instituciones, incluso un equipo de fútbol, han dado muestras de solidaridad con la situación en la que se encuentra la abuela.

La mujer fue desahuciada por una deuda con un "prestamista particular" de su hijo estimada en más de 70.000 euros (más de 80 mil dólares), ante lo que el técnico del equipo madrileño de fútbol Rayo Vallecano, anunció el pasado 22 de noviembre que su club asumiría el pago del alquiler mientras se solventaba su situación.

Tras esta notificación, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ofreció este lunes a la anciana una vivienda social municipal, pero el asesor jurídico de la desahuciada y abogado de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), Manuel San Pastor, criticó esta respuesta y se refirió al tema de los fondos buitres.

"Lo que (la alcaldesa) tiene que hacer es no dejar viviendas vacías y tampoco venderlas a fondos buitres", expuso el abogado, quien recurrió al refrán: "obras son amores y no buenas razones" para exigir un mayor compromiso del Ayuntamiento con el problema de los desahucios hipotecarios, muchos de ellos fruto de la crisis económica que en gran parte causó la "burbuja inmobiliaria" en España.

A propósito de este caso, la PAH protestó este lunes ante la sede del Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima) "contra la venta de viviendas públicas a fondos buitre" y la contradicción que "estas viviendas no sean otorgadas a personas en dificultades".

El Ministerio de Economía de España también anunció que gestionará una vivienda en alquiler para Carmen, lo cual su defensor calificó como un "brindis al sol" y agregó que "cuando veamos las obras, juzgaremos".

Carmen, por su parte, recibió con escepticismo el ofrecimiento de Botella, pues como ella misma admitió está "derrengada" tras el desalojo de la vivienda que habitaba desde hace medio siglo, cuando tuvo que instalarse en la casa de un familiar a la espera de alguna solución para su problema.

En su entorno aseguran que no "creerán nada" hasta que puedan ver "una solución clara y real", y agradecieron la solidaridad de sus vecinos, que "están sufriendo por nosotros, hasta los extranjeros".

Según el hijo de la anciana, Luis Jiménez Martínez, su madre está "muy afectada, sin poderse creer lo que le está ocurriendo".

El asesor jurídico de Carmen dijo que recurrirá el procedimiento para que el juez estudie de oficio las cláusulas abusivas de este caso, al considerar su asesor que hay motivos para la nulidad.

El abogado también espera que la anciana pueda recuperar sus pertenencias, pues el desahucio se produjo sin que pudiera sacar sus pertenencias de la vivienda.

"Ella es una persona fuerte, pero está cansada y triste por lo que está viviendo", expone el asesor jurídico de Carmen, que tras el protagonismo informativo de las últimas semanas decidió guardar silencio en su nuevo domicilio.