Denuncian que en Bogotá hay más de 26.400 señales de tránsito en mal estado
Las localidades de Engativá y Usaquén son las zonas en donde se presenta la mayor cantidad de señales de tránsito dañadas.
Desde el Concejo de Bogotá se denunció que existe un reporte de más de 26.400 señales de tránsito averiadas en la ciudad que afecta la movilidad de algunas vías. Su pésimo estado se convierte en un peligro para conductores, peatones y usuarios de bicicleta, además de afectar la movilidad de la ciudad.
Según el concejal Rolando González, de esas señales en mal estado, el 73% corresponde a señales reglamentarias como 'pares' y 'cruces prohibidos' y el 13% son preventivas.
“Una señal en mal estado, representa no solo dificultades en la movilidad sino el aumento de riesgo de accidentalidad en la ciudad”, dijo el concejal Gonzalez, quien agregó que en Bogotá hay 275.936 señales tipo pedestal, de las cuales el 80% son reglamentarias, el 13% son preventivas y el 7% son informativas.
Las localidades de Engativá, Usaquén, Suba, Chapinero, Puente Aranda y Kennedy, son las zonas de Bogotá en donde hay mayor cantidad de señales en mal estado.
Las principales deficiencias detectadas son: ausencia de funcionalidad daños generados por terceros (grafitis, stickers pegados, hurto, etc.) y condiciones de deterioro ambiental o por accidentes. Las señales verticales más afectadas son el 'Pare' , el ́sentido único de circulación y 'prohibido parquear'.
El Concejal encontró deficiencias en el cumplimiento de las metas de instalación y mantenimiento de señales de tránsito. La meta de instalación de 35.000 señales se encuentra rezagada; en el año 2016 se instalaron 2.414, en 2017 se pusieron 6.218 con un avance total del 24% de la meta del cuatrienio.
“En el año 2017, solo se hizo mantenimiento a 90.593 señales verticales que corresponden a un 32% de las instaladas. Igualmente existen fallas en la ejecución de los contratos que ocasiona su retrasos”, sostuvo González.
El Concejo de Bogotá evalúa la posibilidad de citar a un debate de control político a las autoridades distritales, para que respondan sobre las señales de tránsito que permanecen averiadas en la ciudad.
