Cargando contenido

Ahora en vivo

Seleccione la señal de su ciudad

Acuerdos con las Farc son la claudicación del Estado ante el terrorismo: Uribe

El expresidente Álvaro Uribe anunció que el Centro Democrático se reunirá en las próximas semanas para estudiar cuidadosamente los acuerdos de paz entre el Gobierno y las Farc, pero cuestionó a simple vista lo que hasta el momento se ha negociado en La Habana.

Por medio de un comunicado, Uribe se pronunció por primera vez sobre los textos dados a conocer por los negociadores y aseguró que se trata del "Estado de Derecho claudicado ante el terrorismo".

El exmandatario afirmó que los textos dejan la impresión de que se trata de una "plataforma política del terrorismo para justificar sus crímenes" y afirman que "la complejidad de los planes descritos, parece un anticipo de disculpas para incumplir".

Dijo que los acuerdos benefician en gran parte a las Farc, ya que no se habla de la extinción de dominio de los bienes de la guerrilla, ni de la investigación de los actos de narcotráfico de ese grupo armado. "Dejan abiertas todas las puertas para mantener cultivos ilícitos", afirma.

"La mención del noble tema de salud pública contra la drogadicción esconde el concepto implícito de legalización, sin distinguir entre el consumidor que, en nuestro concepto, no debe ser llevado a la cárcel sino sometido a rehabilitación, y el distribuidor que debe ser llevado a prisión", añade el comunicado de Uribe.

El Senador y líder del Centro Democrático insistió en que los acuerdos transitorios llevan a Colombia al castro-chavismo, que acabaría con el sector agropecuario y la iniciativa privada.

Este es el comunicado de Álvaro Uribe

Textos de Cuba. El Estado de Derecho claudica ante el terrorismo

La bancada parlamentaria del Centro Democrático hará una reunión ampliada en las próximas semanas para realizar un análisis detallado de los textos nuevamente publicados entre el Gobierno Santos y el grupo terrorista Farc.

Como el lanzamiento de una plataforma política del terrorismo para justificar sus crímenes es la impresión que dejan los textos, con claudicación del Gobierno para realizar sus tareas en espera de la aceptación del terrorismo. La complejidad de los planes descritos parece un anticipo de disculpas para incumplir.

Sobre narcotráfico acuerdan adelantar investigaciones judiciales efectivas con excepción de Farc que se esconde en el abuso de la palabra conflicto. Hablan de extinción del dominio menos a los bienes de Farc, lo mismo en relación con lavado de activos. Dejan abiertas todas las puertas para mantener cultivos ilícitos. La mención del noble tema de salud pública contra la drogadicción esconde el concepto implícito de legalización, sin distinguir entre el consumidor que, en nuestro concepto, no debe ser llevado a la cárcel sino sometido a rehabilitación, y el distribuidor que debe ser llevado a prisión. El Gobierno acepta desconocer todos los esfuerzos de Colombia en materia de sustitución de cultivos, protección de bosques, etc, y erige al grupo terrorista como ideólogo y co ejecutor de una "nueva política" anti drogas. Se recomienda la lectura cuidadosa de las páginas 17 a 24 del texto respectivo.

La apelación a los campesinos y a las comunidades es idéntica a lo que hicieron el Castrismo y el Chavismo para acabar primero con el sector agropecuario y después con toda la iniciativa privada.

A lo anterior se suma el crecimiento sistemático y general de la violencia, lejos de ser expresiones aisladas como lo atenúa el Presidente de la República.