Asesinan a otro líder social en Antioquia
En menos de una semana se registran dos homicidios de miembros del movimiento Ríos Vivos.
Desconocidos asesinaron con armas de fuego a Luis Alberto Torres, integrante de la ONG Ríos Vivos, y a su hermano Duvián Andrés Correa en Puerto Valdivia.
Las víctimas de 35 y 20 años, respectivamente, se encontraban barequeando en el sector conocido como El Pescado, cuando hombres armados dispararon en repetidas ocasiones hasta arrebatarles la vida.
Aunque se desconoce con exactitud las razones de este crimen, sus compañeros sospechan que estaría relacionado con su activa participación como miembro de la Asociación de Pequeños Mineros y Pesqueros de Puerto Valdivia (Ampa) articulada a Ríos Vivos, movimiento que la semana pasada también sufrió el asesinato de otro integrante.
Por eso la vocera de esa organización, Diana Marcela Giraldo, exige que la Procuraduría y la Fiscalía investiguen con celeridad estos crímenes de los líderes sociales, pues en esa zona Norte de Antioquia persiste una fuerte disputa de grupos armados ilegales.
"Los compañeros estaban barequeando, en un lugar donde hay disputa territorial, cuando llegaron y los asesinaron. Le pedimos a la Procuraduría que investigue estos casos y a la Fiscalía, que nos diga qué está pasando", señaló.
La víctima de la semana anterior se trató de Hugo Alberto George Pérez, de 47 años de edad, quien fue ultimado junto a su sobrino de 23 años a manos de sicarios en zona rural de ese mismo municipio.
Ambos líderes asesinados tenían en común que desde sus condiciones de agricultor y minero informal se oponían al proyecto Hidroituango, pues habían denunciado las afectaciones que traería para las comunidades el desarrollo de esa presa.
Hace una semana, en zona rural de Valdivia, Norte de Antioquia, asesinaron a Hugo Alberto George Pérez de 47 años de edad, integrante del Movimiento Social Ríos Vivos y quien era opositor del proyecto Hidroituango. En el ataque armado, también murió Domar Egidio Zapata George de 23 años, sobrino del líder.
Isabel Cristina Zuleta, vocera de Ríos Vivos, aseguró que el líder era padre de doce hijos, diez de ellos menores de edad y desempeñaba labores de agricultura para sostener a su familia.
