Fuerza Pública pedirá perdón por una masacre hace 18 años
El acto será este viernes en San José de Apartadó.
En cumplimiento de una sentencia del Tribunal Administrativo de Antioquia, el Ejército y la Policía ofrecerán disculpas públicas este viernes a la comunidad del corregimiento de San José de Apartadó por no brindar las garantías de seguridad que hubieran impedido una masacre el 19 de febrero de 2000.
Ese día, un grupo de paramilitares del Bloque Bananero -liderado por Hebert Veloza García, alias HH-, incursionó en ese territorio y asesinó a cinco campesinos. Lo cual ocasionó el desplazamiento de más de 2.400 pobladores.
El presidente de la Junta de Acción Comunal de ese corregimiento, Fredy Vidal, aseguró que si bien el acto de perdón es importante, aún esperan una verdadera reparación colectiva de parte del Estado.
"¿Qué vemos nosotros allí que no es muy coherente pedir perdón?, es halagador y la gente lo necesita, pero más que pedir perdón, queremos que haya una reparación colectiva, porque el abandono en el que nos encontramos es impresionante", señaló el líder.
Por este crimen, un juzgado especializado de Antioquia condenó a 24 años de prisión al entonces empresario y exparamilitar Raúl Emilio Hasbún Mendoza, conocido como “Pedro Bonito”.
El acto de perdón se realizará este 8 de junio a las 10 de la mañana en el parque principal de San José de Apartadó y será presidido por los coroneles Gerson Fajardo Guevara, comandante de la Policía de Urabá, y José Antonio Dangond, comandante de la Brigada 17 del Ejército.
Caso de Medellín
La Corte Interamericana de Derechos Humanos ordenó al Estado pedirá perdón a los familiares de 16 jóvenes asesinados por un grupo paramilitar, el 29 de junio de mil 996, en el corregimiento Altavista de Medellín, donde otros cuatro habitantes resultaron heridos.
Según los testimonios de varios desmovilizados de las autodefensas ante los fiscales de Justicia y Paz, el ataque habría sido coordinado con altos mandos del Ejército para combatir a las milicias urbanas de las Farc y el ELN, pero los agresores dispararon de manera indiscriminada y mataron a personas ajenas al conflicto armado.
Es por ello, que el Estado reconoce su responsabilidad en la masacre y rinde un homenaje a las víctimas y familiares.
