Cinco lugares imperdibles de La Guajira que debe visitar
Para muchos viajeros, uno de los lugares más mágicos de Colombia es La Guajira, un terreno lleno de playas hermosas, cultura y magia.
No cabe duda que el departamento de La Guajira es uno de los lugares más mágicos del país, lleno de paisajes hermosos, mares azules y cristalinos que enamoran a cualquiera.
Su territorio guarda sitios de ensueños, desiertos de dunas, bellos arrecifes, corales y playas salidas de una película. En este gran lugar se pueden encontrar culturas variadas, sin embargo, la que predomina en el departamento son los indígenas Wayuu.
Gracias a toda su belleza se ha convertido en una parada casi obligatoria para cualquier colombiano o extranjero que viaje a la costa Atlántica.
Varios viajeros comienzan este grandioso viaje desde el Parque Nacional Tayrona, luego atraviesan la Sierra Nevada de Santa Marta, hasta llegar al hermoso desierto de La Guajira.
RCN Radio preparó una lista de los cinco lugares turísticos imperdibles de este bello territorio.
Parque Nacional Natural Macuira
Este hermoso lugar se encuentra localizado en el extremo norte del departamento de La Guajira, al noroeste del municipio de Uribia, muy cerca de Riohacha.
Es considerada una riqueza ambiental en el país, ya que posee un ecosistema de bosque nublado y este funciona como un regulador hídrico para la región.
Rico en fauna y flora, el Parque Nacional Macuira, combina un bosque de niebla con un bosque seco tropical y ha sido catalogada como un área de importancia para la conservación de aves de Colombia y del mundo entero.
Uno de los planes favoritos de los turistas es ver el atardecer, caer bajo la arena o disfrutar de un tour en jeep para conocer las áreas protegidas.
Santuario de Fauna y Flora Los Flamencos
Uno de los grandes espectáculos de La Guajira es sin duda alguna este lugar, el cielo azul despejado y sus arreboles de un color rosado intenso son distintivos del santuario.
Los flamencos son dueños del territorio, pues son miles los que posan en el mar, en sus arenas y en sus cielos.
Para llegar una de sus rutas principales es por Santa Marta, tomando un bus hasta Riohacha y desde ahí seguir por la vía terrestre hasta el municipio de Camarones; luego se debe tomar una lancha que llegue al Centro Administrativo Cabaña Guanebucane, la entrada del Santuario.
Además del avistamiento de aves que puede disfrutar, también podrá vivir un intercambio cultural con las comunidades afros e indígenas que habitan en el territorio.
Cabo de la Vela
Llegar a este sitio es sumergirse en la cultura Wayuu, llena de costumbres, rituales, historias, colores, danza y magia.
En el Cabo podrá encontrar hermosas playas y arena de color naranja, el color es tan transparente que se pueden ver fácilmente los peces y corales.
Asimismo, desde allí podrá visitar el Pilón de Azúcar, que tiene una vista de 360 grados del mar y el desierto. A través de los años se ha consagrado como uno de los lugares sagrados de los indígenas.
Otros de los atractivos es el Faro, un mirador ubicado frente al mar, desde allí se pueden apreciar unos fabulosos atardeceres. Para llegar al cabo de la vela se debe llegar a Uribia y desde ahí tomar una camioneta hasta sus hermosas aguas.
Manaure
Este corregimiento es conocido por tener la mayor cantidad de sales marítimas más importantes del país, con una producción de aproximadamente 2.5 millones de toneladas de sal cruda y 4.000 hectáreas.
Los amaneceres y los ocasos son casi mágicos, los colores que pintan el cielo son turquesa y rosados tornasolados, esto es una de las grandes maravillas de Manaure. Para llegar a Manaure se debe coger un autobús desde Riohacha o Maicao. El precio de este varía entre $10.000 a $15.000.
El plan predilecto del municipio son las Salinas de Manaure, donde se puede conocer el proceso de la sal, también están las playas de Mayapo, las cuales tienen su arena totalmente blanca y el color del mar mezcla los tonos verdes y aguamarina.
Punta Gallinas
Es un lugar maravilloso, pues es la punta norte del continente suramericano, el mar en este lugar es totalmente cristalino y hay gigantes dunas (acumulación de arena en los desiertos), entre desiertos rocosos y ecosistemas de manglar.
Desde allí se puede conocer el Faro de Punta Gallinas o las Dunas de Taroa.
Para llegar se debe tomar un carro desde el Cabo de la Vela o hacer un recorrido en bote de aproximadamente dos horas.
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