Conflicto entre pescadores artesanales y el Distrito por no poder vender de manera adecuada sus productos en el mercado de Bazurto
10 Jun 2016 - 01:47 am
La ciénaga de Las Quintas, uno de los cuerpos de agua más importantes de Cartagena, ha sido la principal victima que ha dejado la actividad comercial que se desarrolla desde hace más de 20 en esa zona de la ciudad, cuando fue trasladado el mercado mayorista, hoy conocido como Bazurto.
La mala disposición de los residuos solidos y los desechos por la manipulación de los alimentos, especialmente los derivados de mar, han golpeado a la ciénaga, haciendo que prácticamente se vuelva difícil para los ciudadanos, poder transitar por esta parte de la ciudad.
"En la ciénaga de Las Quintas confluyen una gran diversidad de impactos, algunos que vienen de otros sectores de la ciudad y otros que son puramente locales. Dentro de los factores locales que afectan a la ciénaga obviamente está el mercado de Bazurto, pero también está el mal manejo de los residuos solidos que hay en el mercado y que terminan dentro de los cuerpos de agua, ocasionando una inmensa carga orgánica acumulándose a la gran carga orgánica que ya tiene, lo cual lleva a un deterioro acelerado de las aguas y que se ha venido presentando desde décadas, posiblemente desde que el mercado está allí", expresó el biólogo Gabriel Luna.
Pero paradójicamente, los pescadores, quienes en parte tienen responsabilidad por la contaminación que registra actualmente la ciénaga, manifiestan que realizar su actividad comercial en la principal central de abastos, se ha convertido en todo un riesgo, especialmente en materia de salubridad.
"Hoy, con mucha tristeza, el pescado se tiene que comercializar en el suelo, en una zona altamente contaminada y que es preocupante porque eso atenta contra la salud de todos los cartageneros que consumen este producto", relató un pescador artesanal.
Gustavo Orozco, líder del programa de inspección, vigilancia y control de medicamentos y alimentos del Departamento Administrativo Distrital de Salud, Dadis, asegura que la entidad viene realizando esfuerzos para verificar y garantizar que la manipulación y la calidad de los alimentos que se comercializan en la central de abastos, cumplan con los estandares requeridos.
"En caso especial de los pescados, todas esas series de productos que se encuentran o expendios que se encuentran a lo largo de la Avenida de El Lago los estamos visitando de manera continúa. Sin embargo, todas las acciones las intensificamos en las épocas de mayor consumo como por ejemplo la Semana Santa (...) tenemos proyectado una series de acciones la próxima semana en ese sector a fin de verificar en algunos muelles de esa área, dentro de una serie de acciones legales, vamos a hacer unas acciones en ese sector, a fin de verificar la calidad de los productos que se están comercializando o que están llegando a una serie de puertos improvisados que se encuentran en ese sector", indicó.
Sin embargo, para Fermin Pérez, representante Legal de la Red de Pescadores Artesanales del Caribe, los impactos ambientales en este punto de la ciudad, se pudieron minimizar si el Distrito hubiese construyera el muelle y el centro de acopio que desde hace más de 8 años han venido solicitando los pescadores artesanales para poder vender de manera adecuada sus productos.
"Edurbe erradicó lo que se conocía como La Islita, que era un barrio dentro de la ciénaga de Las Quintas, a ellos los trasladó a otros sitios, yo nosotros en un acuerdo que lo tengo, con Edurbe y Corvivienda, nosotros nos comprometimos en trasladarnos de manera voluntaria hasta el sitio donde estamos que está frente a la Avenida El Lago frente a Martínez Martelo temporalmente mientras se adelantaban los trabajos del centro de acopio y el muelle de embarque y desembarque. Esto, hace 8 años y aún no se ha cumplido, he hecho derechos de peticiones, acciones de tutela y el director de Edurbe me contestó que no habían recursos", relató.
Pero frente a estos planteamientos señalados por el líder de los pescadores, el secretario de Infraestructura, Wilson Herrera, dijo desconocer el acuerdo para la construcción del muelle y el centro de acopio. Acotó además que en caso tal de que exista, manifestó que sería improcedente debido a que sobre el mercado de Bazurto existe una orden judicial que obliga al Distrito trasladar la central de abastos.
"Realmente registramos con preocupación este tipo de compromisos que podrían facilitarle la vida a un sector muy sentido de la ciudad, pero en este caso yo tengo que aclarar que la sentencia que nos obliga a trasladar el mercado de Bazurto y recuperar urbanísticamente esa zona del sector de Las Quintas, nos imposibilita comprometernos a construir cualquier estructura que tenga que ver con el mercado de Bazurto", expuso el funcionario.
Esta, es una de las tantas historias que contextualizan la problemática ambiental en Bazurto, por lo que mientras el Dadis mantiene los operativos en la zona y el Distrito evalúa la forma cómo va cumplir la sentencia que ordena el traslado del mercado; los pescadores artesanales seguirán realizando la comercialización de sus productos, bajo estos escenarios de insalubridad.