Hospital San José de Maicao da ejemplo y se recupera después de su intervención

El 14 de junio de 2016, la Superintendencia Nacional de Salud llegó a Maicao para hacer una primera intervención del hospital San José, en donde encontró graves problemas de tipo asistencial, económico y administrativo.

No obstante el 29 de agosto de 2018, bajo la dirección del actual superintendente Fabio Aristizábal Ángel, se decidió hacer una nueva intervención al no evidenciar avances significativos que remediaran los indicadores y especialmente la situación financiera de este centro asistencial.

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En ese momento, el hospital presentaba deudas más de 11.000 millones de pesos con el personal de planta y con los contratistas, no había licencia de funcionamiento para rayos X, no se había implementado el Triage en urgencias y se ofrecían especialidades que no contaban con el personal profesional idóneo para prestarlas. 17 meses después, la Supersalud ha reportado mejoras significativas.

“La intervención ha arrojado cifras positivas; para diciembre del año pasado, el hospital se puso al día con sus obligaciones laborales y, a la fecha, sigue cumpliendo con el pago al personal de planta, a los contratos de prestación de servicios y a los proveedores corrientes”, señala la entidad a través de un comunicado.

Agrega que "por su parte, el recaudo por concepto de cartera subió de 20.923 millones de pesos en 2018 a 32.847 millones de pesos en el 2019; mientras que la facturación por venta de servicios hospitalarios, de un año a otro, aumentó de 39.370 millones de pesos a 48.291 millones de pesos".

Los avances también se presentaron en temas asistenciales y administrativos, pues se adquirieron equipos de alta tecnología destinados para la atención y se invirtió en infraestructura.

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“Se dotó el servicio de urgencias, se trajeron nuevos equipos biomédicos y muebles de uso hospitalario para los servicios de baja complejidad, se adquirió un tomógrafo para el servicio de imágenes diagnósticas y se construyó el área de lavandería, todo ello con una inversión superior a los 3.600 millones de pesos”, añadió la supersalud.

En relación con las acciones tendientes a la atención y control del coronavirus en este centro asistencial, en el que se prestan servicios a la población migratoria, se han realizado obras para la adecuación de 10 camas UCI.

Así mismo, se instalaron once unidades de vivienda para ubicar 66 camas de hospitalización, recibidas por la Agencia de la Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), las cuales están en proceso de dotación para poder hospitalizar y aislar a las personas que resulten afectadas por la pandemia.