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El proceso comenzó con 990 vacunas
RCN Radio

El ministro de Salud Fernando Ruiz le dio inicio este viernes,  al plan de vacunación en el departamento de Caldas como estaba programado una semana atrás.

A esta región del país llegaron 990 biológicos que son aplicados en centros asistenciales de Manizales, particularmente en el SES hospital de Caldas, donde fue inmunizada la enfermera Juliana López y seguidamente otros integrantes del sector salud de la misma IPS.

Posteriormente, el proceso de vacunación continuó en el hospital Santa Sofía, con la médica María Cristina Florián quien labora allí como jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos y quien fue amenazada de muerte el año pasado por familiares de un paciente que murió de Covid-19 en la UCI que ella dirige.

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“Yo soy médica de vocación; nunca quise ser otra cosa diferente a ser médica. Fui internista porque pensé que era la mejor forma de ser una intensivista. Hice cuidado intensivo con toda la pasión del mundo, totalmente entregada a mi profesión y con el amor que me ha generado el hecho de trabajar en un hospital público”, así se describió a instancias de RCN Radio, María Cristina Florián Pérez, al ser preguntada sobre quién es esa persona de la que mucho se escucha hablar no solo en el Hospital Santa Sofía, donde coordina la Unidad de Cuidados Intensivos, sino en el departamento, donde se convirtió en la primera profesional en ser vacunada contra la Covid-19.

Esta experimentada médica nació en Cali, estudió su pregrado en la Universidad de Popayán, cursó Medicina Interna en la Universidad Nacional y posteriormente hizo su práctica de Cuidado Intensivo en la Clínica Shaio de Bogotá, egresada del programa de la Universidad de La Sabana.

Sin embargo, y aunque parecía que su vida laboral se iba a desarrollar en la capital de la república, un repentino giro del destino la trajo a tierras caldenses, de donde nunca más quiso partir.

“Cuando el programa de cirugía cardíaca estaba arrancando en Manizales solicitaron un intensivista especialista en cardio-crítico y yo me vine a trabajar con el programa y ya llevo más de 20 años aquí", manifestó la doctora Florián Pérez al destacar que el hecho de vivir en Manizales cambió su vida y afirmar que nunca ha contemplado la posibilidad de trasladarse a otra ciudad.

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Esta mujer, que ha tenido que sortear muchos momentos de adversidad y decepción por cuenta del Covid-19 tal y como le ha sucedido a miles de profesionales más, contó lo que para ella ha sido lo más difícil de esta pandemia provocada por el coronavirus, un enemigo silencioso que ha tenido que enfrentar estoicamente en la primera línea de batalla de su querido Hospital Santa Sofía.

“No es solo orgullo lo que siento, también es dolor. Ha sido un año supremamente difícil para el personal de la salud, que se siente desesperanzado cuando la gente no entiende que realmente las medidas de distanciamiento y de protección son la única forma de cuidarnos", aseguró y reiteró que esa situación nace en la actitud de las personas que leen muchas cosas en internet que no son ciertas y las dan como un hecho e igualmente, en presenciar la muerte de muchas personas en la Unidad de Cuidados Intensivos.

"Creo que todo eso hizo que este año fuera muy difícil y quizá este proceso de vacunación lo que nos permite es cambiar el panorama y ver la luz al final del túnel”, expresó en medio de lágrimas y visiblemente conmovida.

A las vicisitudes que deben superar casi a diario estos héroes de carne y hueso, se suma el sacrificio familiar que deben hacer muchos profesionales que tuvieron que separarse de sus seres queridos para protegerlos del virus.

Y aunque desde este viernes se enciende una nueva luz de esperanza por la priorización de la vacuna para la gente que hace parte del entorno del sistema de salud, se debe insistir en la rutina del autocuidado por los efectos colectivos que tiene.

“Ser de las primeras personas que van a vacunar me hace sentir reconocida, pero no solamente en mi labor sino en la de todo mi equipo, por eso veo en esto da esperanza. Porque cuando comenzamos a ver los devastadores resultados en Europa y sentíamos temor por la situación que se nos venía encima, pensé que no iba a ser capaz, pero nos tocó salir a enfrentar las creencias populares y el maltrato de la gente”, manifestó esta mujer con temple de acero.

A propósito del maltrato y de los actos de intolerancia a los que se vio sometida especialmente al comienzo de la pandemia, la médica María Cristina Florián recuerda aquel lamentable caso en el que el familiar de un paciente que se sentía impotente por la muerte de su ser querido, la responsabilizó de su deceso.

Por fortuna, el rechazo generalizado de su gremio ante la amenaza recibida y su gesto de solidaridad con ella así como con su equipo de trabajo, la motivaron a seguir adelante con ese apostolado de "salvar vidas" en tiempos de pandemia.

“La amenaza para mí fue un golpe duro, no estaba acostumbrada a recibir malos tratos y mucho menos una amenaza contra mi vida. Esto le hace a uno cuestionarse acerca de si realmente vale la pena lo que está sucediendo”, expresó.

"El llamado es a que nos sigamos cuidando, porque hoy cada muerte que ocurre por Covid-19 es un fallecimiento innecesario y es una muerte que entre todos podemos prevenir en la medida en que guardemos nuestra distancia, utilicemos el tapabocas de la forma adecuada y nos lavemos las manos", dijo la doctora María Cristina Florían, al insistir en que con estas medidas de prevención evitamos que muchas personas fallezcan.

En Manizales se requieren 315 mil 52 vacunas para lograr la inmunidad de rebaño, es decir, el 70%, dijo por su parte el alcalde Carlos Mario Marín.

Fuente

Sistema Integrado de Información

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