En Risaralda, delincuencia común usan nombre de bacrim para delinquir

Según una investigación, adelantada por el Movimiento Nacional de Víctimas, en el área metropolitana Pereira y Dosquebradas, existen cerca 80 bandas delincuenciales que están utilizando las 'chapas' y nombres de grandes grupos criminales, a manera de franquicia, para cometer todo tipo de delitos. 

El estudio revela que incluso algunos delincuentes están usando los nombres de bandas reconocidas, por su actuar a nivel nacional, y poco o nada tienen que ver en esta zona del país.

Eisenhoward Dejanón Zapata, representante por Risaralda ante el Movimiento Nacional de Víctimas, aseguró que se ha podido detectar que en Pereira hay 57 bandas delincuenciales y en Dosquebradas otras 22, cuyos integrantes se hacen llamar como 'Cordillera', 'La Oficina', 'Los Urabeños', 'Los Caparrapos' y otras bandas, con el fin de sembrar el terror entre la ciudadanía y cometer bajo esta condición extorsiones, homicidios y cobro de dineros. 

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“En el tema de Risaralda, muchas organizaciones toman chapas diferentes, casi como utilizar franquicias, para cometer sus respectivos delitos. Ejemplo de ello es cuando utilizan el nombre de 'Cordillera', que sí es un grupo delictivo que ha existido acá en el departamento, principalmente en el área metropolitana y en Belén de Umbría, de manera que esa chapa es utilizada cada rato para el accionar criminal de otras menos conocidas”, señaló Zapata.

Sin embargo, el representante por Risaralda ante el Movimiento Nacional de Víctimas, también dejó en claro que no siempre es preciso que usen el nombre de bandas delincuenciales nacionales, por temas referentes a territorios donde actúan.

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“En el tema de coger la chapa de organizaciones como 'Los Urabeños' o 'El Clan del Golfo', o incluso 'Los Caparrapos', sí desdice mucho, porque en esta zona no hay presencia de ellos”, señaló.

Puntualizó que “es indiscutible que aquí en Risaralda, y directamente en el área metropolitana, hay delincuencia común y todas utilizan chapas diferentes para intimidar a la gente, extorsionar, cometer homicidios e inclusive funcionar como oficina”.