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Piedad Córdoba, excongresista
Piedad Córdoba, excongresista
Colprensa

Las más recientes revelaciones que hizo un exasesor de la exsenadora Piedad Córdoba, sobre sus presuntos vínculos con las Farc y las gestiones para la liberación de secuestrados, generaron un verdadero terremoto político.

Algunas víctimas del secuestro se pronunciaron sobre estos señalamientos contra la dirigente y afirmaron que es muy cruel que hubiere utilizado esta labor humanitaria para favorecer sus intereses políticos.

El general Luis Mendieta, quien estuvo en poder de las Farc durante 11 años, afirmó que Piedad Córdoba fue una “traficante” del dolor de todos los secuestrados.

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“Cuando fui rescatado y regresé a la libertad por la operación Camaleón del Ejército, mi familia me contó que Piedad Córdoba les había dicho que sería el último en salir si era que salía. Me estaba condenando a muerte y en cada reunión aumentaba el sufrimiento de mi familia al asesinar la esperanza de salir vivo algún día. Piedad Córdoba fue una traficante del dolor del sufrimiento de los secuestrados y de sus familias”, indicó.

Mendieta señaló que después de tantos años aún no se conoce la verdad sobre lo ocurrido con el flagelo del secuestro, e instó a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) a que avance en la investigación de este crimen de lesa humanidad.

Por su parte, el congresista conservador Jaime Felipe Lozada, hijo de Gloria Polanco, que también estuvo plagiada por la guerrilla, dijo que muchas revelaciones hechas por el exasesor de Córdoba sobre la liberación de secuestrados, son ciertas. 

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“Puedo decir que gran parte de lo que dice Andrés Vásquez es cierto, pues como hijo de Gloria Polanco y en Venezuela lo pude constatar (…) El poder y el grado de influencia de Piedad Córdoba en el Gobierno venezolano y en la guerrilla era impresionante, se podría decir que era quien coordinaba y articulaba la relación entre Chávez y Farc, no se movía una hoja sin su consentimiento, ella definía quien salía y quien no”, indicó.

Lozada afirma que la excongresista tenía mucha más influencia en el régimen chavista, que el propio Nicolás Maduro, quien ese momento se desempeñaba como canciller. Las víctimas del secuestro afirman que no se puede permitir que la verdad sobre lo ocurrido con este flagelo sea trastocada.

 

Fuente

Sistema Integrado de Información

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