La búsqueda de un padre terminó 3 décadas después gracias a Facebook

Luego de 28 años sin saber de su paradero, la familia de un hombre volverá a reencontrarse con él. La directora de un ancianato usó la red social Facebook para hallar a los seres queridos del hasta ahora desaparecido.

De Camilo Patiño, sólo se sabía que buscando salir de la pobreza en el municipio de Gabarra (Norte de Santander), en donde vivía, había intentado dedicarse a la pesca.

Liliana su hija, recuerda que eso mismo le contaron sus hermanos cuando apenas tenía 5 años de edad.

“Le dijeron a mi hermana que él había salido a pescar, que él había salido en una lancha y de ahí más nunca supimos de él”, asegura la mujer.

Jesús Solano, medio hermano de Camilo, también recibió la misma versión, tras indagar por su paradero, cuando en 1989 no volvió a saber de su familiar.

“Algún amigo de él lo incentivó, haciéndole creer que el pescado estaba dando mucha plata, él vendió lo que tenía y se fue yo pienso que para el río Magdalena, donde se consigue el pescado”, indicó.

Y en esa misma búsqueda que terminó hace poco, recibían noticias que no eran alentadoras.

“Que él se había ahogado, que porque se le había enredado el reloj en una malla, una red de esas con las que pescan y que no había podido salir”, agregó Solano.

Liliana asegura que la incertidumbre aparecía cada noche cuando las dudas sobre el paradero de su padre, regresaban.

“Siempre nosotros vivíamos con esa angustia de no saber si estaba vivo o si había fallecido”, indica la hija de Camilo.

No la habían perdido, pero la esperanza de encontrarlo con vida, era cada vez menor.

“Nunca nadie se apareció diciendo, yo lo vi está vivo, todo era que él estaba muerto, esas eran todas las noticias que se sabían de él”, agregó Jesús Solano.

Pero de un momento a otro la historia de Camilo Patiño cambió y luego de llegar a un hogar para ancianos en San Pablo en el sur de Bolívar, recibió de Tatiana Cortés, la directora del lugar, una orientación para encontrar el camino de regreso a casa.

“Utilizando la herramienta del Facebook yo empecé a hacerle algunas preguntas acerca de su familia, pues él dejó los hijos muy pequeños, tres mujeres y dos hombres, entonces él empezó a darme los nombres”.

Una vez hechos los contactos a través de las redes sociales, la noticia se confirmó. Camilo Patiño, no solo estaba vivo, también estaba bien de salud y quería encontrar a su familia.

“Imagínese, una alegría inmensa, una dichosa alegría saber que si es nuestro papito” asegura Liliana Patiño.

Camilo tiene 60 años y aún desconoce que se reencontrará con sus seres queridos, para ello lo están preparando en el hogar de ancianos.

“Al día de hoy Camilo no lo sabe, contratamos una sicóloga para que tratara con él el tema, pues él quiere volver a ver a su familia, lo que pasa es que él es un poquito orgulloso, pero él todavía no sabe que yo ya los encontré”, revela Tatiana Cortés.

La familia en Popayán, en Norte de Santander y en Valledupar, prepara maletas para el reencuentro.

“En este momento la expectativa es de encontrarnos con él, de devolverlo a su hogar, porque sus hijas, todos los que estamos vinculados a la familia de él, estamos interesados en devolverle esos momentos, que de pronto él no tuvo con sus hijos, con su esposa, con nosotros los hermanos, sobrinos y con toda la familia, pues que él lo recupere”, puntualiza Jesús Solano.

Camilo Patiño y su familia se reencontrarán en Barrancabermeja. Sus seres queridos esperan escuchar muchas historias, las mismas que hay por contar de las tres décadas que pasaron desde que salió de su casa y no regresó.