En acueducto de Villavicencio sigue la emergencia por daños

Llegaron los 10 carrotanques que suministró la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo (UNGRD) en convenio con la Cruz Roja Nacional, a raíz de la emergencia que afronta la ciudad por los daños en la bocatoma y en la línea de aducción del acueducto a causa del fuerte invierno. 

Los carrotanques empezaron a suministrar 60.000 galones de agua por cada viaje, inicialmente en los barrios del camino ganadero, barrios de las comunas cuatro y cinco otros sectores de Villavicencio dijo Wilmar Barbosa. 

“Nuestro agradecimiento y reconocimiento a la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo y a la Cruz Roja por la diligencia y apoyo brindados lo que nos ayudará a superar en gran parte  la distribución de agua en la ciudad de acuerdo con el cronograma establecido por la Empresa de Acueducto”, manifestó el mandatario municipal.

Explicó que los carrotanques están siendo operados por conductores de la Policía Nacional, de la Empresa de Acueducto y de la Secretaría de Infraestructura, en compañía de personal de la misma empresa para evitar que se registren inconvenientes en la distribución del líquido en los barrios.

“Estamos afrontando una situación muy complicada que debemos entender los villavicenses, porque los efectos de la naturaleza son muy complicados de controlar", afirmó Barbosa. 

"Ya la capacidad técnica y operativa con los últimos daños en la tubería de la bocatoma se copó, por eso, hemos acudido al Gobierno Nacional para tratar de superar la emergencia la cual podría tardar unos seis meses y hasta más”, explicó Barbosa Rozo. 

La visita este viernes a Villavicencio del ministro de Vivienda, Jonathan Malagón González, será aprovechado para concretar respaldos para el proyecto de la nueva bocatoma alterna para el acueducto. 

Se ha anunciado que con esta nueva bocatoma se aportaría cerca de 900 litros de agua por segundo, desde quebrada Blanca en la Vereda María La Alta. 

“El proyecto está dividido en dos etapas: la primera es la construcción de la bocatoma con su respectiva línea de aducción en 2.000 metros de tubería, la que interceptará a la actual bocatoma, esta no estará en el cauce del río Guatiquía, ni estará adosada a la montaña, es decir, estará bajo terreno firme hasta llegar a la Planta de Tratamiento de Agua Potable de La Esmeralda”, agregó Barboza Rozo. 

Esta fase inicial tiene una inversión de 15.000 millones de pesos”, explicó el mandatario Barbosa Rozo.  

La segunda etapa, que cuesta 17.000 millones, es construir una línea directa de 6.000 metros más de tubería a esa bocatoma, que estará en la quebrada Blanca, kilómetros abajo de quebrada La Honda y del río Guatiquía.