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Grandes del vallenato despidieron a Diomedes Díaz con sus canciones

Después de una multitudinaria caravana de miles de fanáticos, amigos y destacadas figuras del vallenato, Diomedes Díaz fue sepultado en el cementerio Jardines del Ecceomo. Durante el sepelio se registraron algunos incidentes con admiradores del Cacique de la Junta.

En la tarima y al lado del cuerpo sin vida de Diomedes Díaz estuvieron figuras como Jorge Oñate, Iván Villazón, Alfonso 'Poncho' Zuleta, Peter Manjarrés, entre otros, en un improvisado concierto en el que también cantaron los hijos de Diomedes Díaz, Rafael Santos y Martín Elías.

Después de varias horas de un sentido homenaje, una multitudinaria caravana trasladó el cadáver hasta el cementerio para darle cristiana sepultura.

A los seguidores del cantante, que desde hace tres días velaban su féretro en la Tarima Francisco El Hombre, se sumaron miles fanáticos procedentes de diferentes partes de Colombia y hasta de Venezuela para asistir a la ceremonia religiosa y homenaje musical de despedida.

Uno de los momentos de más emoción para la multitud fue cuando su hijo Rafael Santos interpretó "Mi muchacho", canción que su padre le compuso en los años 80 y que se convirtió en uno de los éxitos del artista, orgulloso siempre de su origen humilde.

A continuación, otro de sus hijos, Martín Elías, interpretó "Mi primera cana", que Diomedes compuso cuando cumplió cuarenta años de edad y que igualmente su voz convirtió en éxito.

Diomedes Díaz, dotado de un extraordinario talento y polémico por sus líos judiciales y problemas con las drogas, falleció a los 56 años de un paro cardiorrespiratorio el domingo 22 de diciembre.

Delante del ataúd de madera con cubierta de cristal, para que sus seguidores pudieran verlo, fueron colocados la fotografía de Diomedes que aparece en la carátula de su último álbum, "La vida del artista", lanzado el pasado 19 de diciembre, tres días antes de morir, y una imagen de la Virgen del Carmen a la que solía citar en sus canciones.

A la multitud que desafió un sol canicular y una temperatura de 35 grados se sumaron autoridades regionales y los alcaldes de varios municipios de la costa atlántica colombiana, así como los principales cantantes del vallenato que, vestidos de blanco, subieron uno a uno a la tarima para cantar al lado del féretro los éxitos de Diomedes Díaz.