Asesinato de líderes sociales es una tragedia: Arzobispo de Cali
Monsalve afirma que hay desmontar las estructuras criminales para frenar los crímenes.
Monseñor Darío de Jesús Monsalve, arzobispo de Cali, calificó como una tragedia el asesinato sistemático de líderes sociales y defensores de derechos humanos en todo el territorio colombiano.
Ante los últimos acontecimiento, monseñor aseguró lo que el país debe hacer es ponerse de pie para proteger en cada territorio a estos líderes y que se exija ante el gobierno conocer la verdad de lo que está pasando.
"Yo creo que mientras no se desmonten las estructuras, digamos originantes de estas muertes, no vamos a poder tener la seguridad de socorrer la vida de nadie y menos de los líderes y lideresas sociales", enfatizó.
Para el arzobispo, tanto el Gobierno, como la comunidad internacional, pero también las comunidades en el territorio, deben unirse para identificar de donde vienen esas instrucciones de muerte.
El prelado de la iglesia católica en la capital vallecaucana, también advirtió a las autoridades en el país que los jóvenes de comunidades afro en Colombia, están siendo reclutados por bandas criminales.
Las declaraciones del arzobispo de Cali, se conocieron en el marco del asesinato de otro líder social en el departamento de Antioquia y el hallazgo de los restos humanos de una persona en el sector del Naya y que podrían pertenecer a Iber Angulo Zamora, secuestrado por un grupo armado ilegal el pasado 5 de mayo.
Ese día el líder social de El Naya, era conducido a Buenaventura por una misión humanitaria para salvaguardar su vida ante las amenazas de muerte que pesaban en su contra, sin embargo presuntos disidentes del frente 30 de las Farc, interceptaron la lancha en el que era movilizado y se lo llevaron con rumbo desconocido.
Además de Iber, desde el 21 de abril se encuentran desaparecidos dos de sus hermanos y un primo, quienes hacían parte del Consejo Comunitario de El Naya.
Ellos son Obdulio Angulo Zamora, de 33 años; Hermes Angulo Zamora, de 28 años, y Simeón Olave Angulo, de 32 años, quienes fueron vistos por última vez cuando se movilizaban por Puerto Merizalde, desembocadura del río Naya.
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