Preocupación en Acandí (Chocó) por paso de unos 700 migrantes irregulares

La situación con los migrantes irregulares en las playas de Acandí (Chocó) es cada vez más compleja: al hundimiento de una embarcación con 32 ocupantes se le suma el ingreso, en la última semana, de por lo menos 700 extranjeros que pretenden cruzar la frontera con Panamá y, de allí, buscar camino a Estados Unidos o Canadá. 

Según Lilia Córdoba, alcaldesa de la localidad chocoana, “van más de 700 migrantes y siguen llegando. Ellos llegan a Capurganá y se unen en dos grupos de más de 300 para pasar hasta donde se despachan los aviones que van al aeropuerto regional de Ciudad de Panamá y, de ahí, no sabemos qué acciones pretenden realizar ”. 

Con gases lacrimógenos, las autoridades panameñas intentan evitar el ingreso pero no ha sido posible.

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La emergencia puede ser peor pues se confirmaron seis casos de malaria africana entre las personas que hacen su tránsito por Colombia, huyendo de la situación política y económica en su país.

La alcaldesa Lilia Córdoba sostuvo que el primer grupo de personas, entre las quienes se identificaron los casos, fue puesto en cuarentena. “Se pide a las otras personas que no continúen, pero no dejan de avanzar”, indicó.

Pese a los controles que se realizan en las playas de la frontera, los migrantes africanos continúan llegando a América y la alcaldesa manifiesta que no siente apoyo suficiente por parte del Gobierno Nacional. “Yo siento que me han abandonado, como si Acandí no fuera de Colombia”, dijo.

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El director de Migración Colombia, Christian Krüger, sostendrá una reunión con las autoridades del país vecino y está previsto que llegue a Acandí, para ver de cerca lo que pasa con esta población y poder atender las necesidades de la comunidad que está temerosa por una posible epidemia.