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Mujeres Tumaco
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La reactivación de la producción de camarón en Tumaco se convirtió nuevamente en la esperanza y el sueño de independencia económica de muchas mujeres del puerto nariñense, quienes han logrado tener un empleo formal y un sustento fijo para sus hijos.

La producción de camarón en Tumaco se había frenado en la década de los noventa por el denominado virus de la 'mancha blanca', que causó el cierre de plantas y nuevas dinámicas económicas vinculadas con el cultivo de coca.

Sin embargo, hace dos años esta actividad volvió a cobrar fuerza en la zona brindando la posibilidad, sobre todo a madres cabeza de hogar, de obtener un empleo formal por horas donde se les garantiza sus prestaciones sociales y hasta un refrigerio.

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Dayana Quiñonez, una joven de 26 años madre de tres hijos, asegura que desde que ingresó a la fabrica Sangara -donde se procesa el camarón- cambió su vida. "Mis ingresos mejoraron y ya llevo aquí un año, tengo un sustento fijo para llevar a mi casa porque antes trabajaba por días y lo que pudiera hacer, no me pagaban prestaciones sociales ni tampoco tenía ingresos seguros, estoy feliz", cuenta.

Una nueva oportunidad

Los indicadores oficiales del Dane señalan que Tumaco tiene más de 200 mil habitantes, de los cuales 48,74 % tiene sus necesidades básicas insatisfechas, 84,5 % vive en pobreza multidimensional y 70 % está desocupada.

Para Tatiana Rendón, líder de la planta Sangara, por eso se tiene prioridad a las madres cabeza de hogar: "Ellas necesitan asegurar su sustento, además de tener tiempo para estar con sus hijos y esa alternativas se las brindamos acá. Ellas pueden trabajar por horas; sin embargo no se van con menos de 70 mil al día y además tienen todo lo de ley".

Incluso, Tatiana asegura que  una buena alternativa para que los jóvenes de Tumaco dejen la siembra de cultivos ilícitos es apoyar este tipo de proyectos productivos y hacer cobren más fuerza en la región.

"La falta de oportunidades laborales hace que muchos  jóvenes se vayan por el camino de la ilegalidad y se metan a sembrar cultivos ilícitos; eso también explica en parte el porqué hay tanta mujer sola con sus hijos", manifestó.

Gladys Angulo, tumaqueña que coordina a las mujeres que participan en el proceso de limpieza del camarón, cuenta que “a las mujeres les gusta trabajar acá, porque ganan bien. Muchas son madres cabeza de familia y prefieren pelar camarón que trabajar en una casa de familia porque ganan más. Tener esta opción es maravilloso porque en Tumaco hay muchas personas que no tienen empleo y, desde que estoy aquí, me siento contenta y tranquila”.

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Margarita Segura, otra madre cabeza de hogar beneficiada por esta actividad pesquera, señaló que su día en la planta inicia a las 7 de la mañana. "Salimos a las 2 (p.m.) o entramos a las 2 (p.m.) y salimos a las 6 (de la tarde), en verdad tenemos flexibilidad y un ingreso asegurado para llevar la comida a nuestros hogares", precisa.

Los primeros frutos

Sumado a esto, las mujeres tienen puesta su esperanza en esta actividad que ya empezó a rendir sus primeros frutos como la apuesta de almacenes Éxito y Carulla, que desde hace seis meses compran a Sangara el camarón que se produce en Tumaco y lo comercializan en sus almacenes, permitiéndoles un ingreso semanal a quienes trabajan allí.

Que estos almacenes nos de la mano en el tema de comercialización para mí es algo que me llena de satisfacción, porque todos los días yo veo cómo las importaciones nos están llenando y nosotros seguimos impávidos sin poder ser competitivos para desarrollar un territorio con equidad. La compra del Grupo Éxito hace viable la comercialización de nuestro cultivo porque rescata lo que hacen las manos tumaqueñas y nos permite visibilizar lo bueno de Tumaco”, Luis Alberto Rosas, productor de larvas de camarón.

Cabe mencionar que el 90% del camarón que se consume en Colombia es importado por lo que este puerto nariñense espera suplir la demanda interna de este producto.

Fuente

Sistema Integrado de Información

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