Policía de Bogotá se retracta: asegura que artefacto no contenía explosivos

A la carrera 7 con la calle 87, donde están ubicadas las viviendas del periodista Felipe Zuleta Lleras y la dirigente de la Unión Patriótica, Aída Avella, llegaron cerca de 20 uniformados quienes se encargaron de aislar la zona de manera preventiva, mientras inspeccionaban el lugar.

En el lugar se encontró un cilindro de tamaño mediano, color blanco y con un computador pequeño en la parte superior, según la Policía este elemento tenía todas las características de un artefacto explosivo.

El propio comandante de la Policía Metropolitana, general Humberto Guatibonza, indicó que una vez se conoció el caso "enviamos antiexplosivos de la Sijín y efectivamente desactivaron una carga que se encontraba dentro de un cilindro".

Momentos después las autoridades confirmaron que el artefacto había sido detonado controladamente y que se trataba de un kilo del explosivo Anfo que había sido abandonado en un paquete.

Incluso, el director de la Unidad Nacional de Protección, Andrés Villamizar, aseguró a través de su cuenta en Twitter que "Hombres de la @UNPColombia apoyaron en la desactivación del artefacto. Mis felicitaciones y reconocimiento. Verdaderos héroes".

Falsa alarma

Sin embargo, horas después el mismo general Humberto Guatibonza, se retractó y aseguró que nunca hubo un artefacto explosivo abandonado en el norte de la ciudad y aclaró que lo que se encontró abandonado es un equipo correspondiente a la ETB.

"Después de revisar las cámaras de seguridad nos dimos cuenta que lo que se encontraba en la carrera séptima con calle 87 no era una bomba, sino un equipo de trabajo de la ETB, en horas de la mañana estuvieron unos técnicos en este punto de la ciudad y por accidente lo dejaron olvidado", aseguró el General Guatibonza.

Según, Guatibonza el equipo encontrado es un micromotor para abrir cajas de la Empresa de Teléfonos de Bogotá.

Frente a la detonación que se presentó en el lugar, la Policía de Bogotá aclaró que ellos mismos hicieron la detonación con un explosivo de baja intensidad.

"Confundimos que esto se trataba de un explosivo porque luego de tenerlo desactivado vimos que contenía elementos muy parecidos a bombas de verdad", explicó.

Confusión

La información inicial generó tal confusión que el Director de la UNP, Andrés Villamizar, también afirmó que se manejaba una primera hipótesis sobre la intención de atacar al periodista Felipe Zuleta.

"Es posible, debo reconocer con preocupación, que la bomba fuera contra @Fzuletalleras. Policía investiga pero esta es una clara hipótesis", escribió en su cuenta de Twitter.

Al respecto también se pronunció la excandidata presidencial, Aída Avella, quien aseguró que, lo que se pensaba que era un atentado, buscaba desestabilizar el proceso de paz.

"Yo hago el llamado a las autoridades, al Presidente de la República (Juan Manuel Santos) para que miren cómo controlan a los enemigos de la paz que están haciendo todo para detener el proceso de La Habana y esto es un campanazo muy grande, porque lo que se viene para el país contra el proceso es muy grave y es un plan de desestabilización de la extrema derecha", afirmó la Presidenta de la Unión Patriótica.

Frente a esto, el comandante de la Policía Metropolitana, general Humberto Guatibonza, aseguró que ya hablaron con el periodista Felipe Zuleta para aclararle que el hecho que se presentó cerca a su domicilio no correspondía a un presunto atentado en su contra.

"Ya nos comunicamos con el periodista y le aclaramos que en ningún momento se trataba de un atentado en su contra, también manejamos la información con la Unidad de Protección", manifestó.

Finalmente, la Policía Metropolitana de Bogotá le solicitó excusas a la ciudadanía por el pánico que este hecho generó entre los habitantes de esta zona al norte de la capital del país.