RCN La Radio desde Buenaventura

El equipo periodístico que se desplazó al puerto colombiano sobre el Océano Pacífico estuvo integrado por la subdirectora de contenidos, Esperanza Rico, y los periodistas Yanelda Jaimes, Juan Carlos Higuita y Hernando Romero Barliza, "El Capi".

Durante esta transmisión especial, que se realizó desde el Auditorio de la Sociedad Portuaria Regional, también participó el director de noticias de RCN La Radio en el departamento del Valle, Jair Lenis.

Durante esta jornada informativa se dialogó con los protagonistas de las noticias de esta hermosa región del occidente del país.

El alcalde de Buenaventura, Bartolo Valencia Ramos, se refirió a los esfuerzos para superar las dificultades sociales en la ciudad.

Dijo que "hoy estamos optimistas en que vamos a iniciar el proceso de desarrollo integral que necesita esta ciudad (...) por donde se mueve más del 60 por ciento de la economía".



Aunque se mostró optimista sobre el futuro de la ciudad, Valencia hizo un fuerte llamado para que la empresa privada, el sector público y la comunidad en general se unan en pro del desarrollo integral del puerto.

"Nos dicen que somos pobres, pero estamos rodeados de una inmensa riqueza. Como Distrito Especial tenemos ahora la posibilidad de potenciar el turismo, la biodiversidad y la industria, aunque no se pueden dejar de lado la agricultura y la pesca. Esto implica que nos visibilicemos mejor y trabajar en equipo para mirar a Buenaventura por lo bueno, su gente pacífica y tranquilidad", dijo el mandatario local.

No obstante, reconoció dos asuntos sensibles que siguen dificultando el día a día de los habitantes de esta ciudad: la falta de un relleno sanitario y del suministro constante de agua potable.

"Son ciertas esas dificultades, aunque contamos con un sitio autorizado para la disposición final de los residuos. Este colapsó hace pocos, pero en 10 días tendremos otro espacio que servirá para recibir la basura durante 18 meses. Además, ya está definido el sitio donde se construirá el relleno sanitario".

La falta de agua potable por acueducto hace que, por ejemplo, el líquido vital llegue a algunos restaurantes en carros-tanque. El Gobierno Nacional indicó que habían mandado 60 mil millones de pesos al puerto para resolver esta situación, pero no se han visto los resultados.

"El tema del agua potable, como el del relleno sanitario, es álgido. Requerimos una inversión de más de 100 mil millones de pesos para obtener agua por 18 horas seguidas, aunque también trabajamos en un plan maestro de acueducto y alcantarillado 24 por 24", para que el suministro sea constante, anotó.

También habló el obispo de Buenaventura, monseñor Héctor Epalza Quintero, quien se refirió a la situación que vive el Pacífico colombiano, que según indicó durante muchos años ha sido relegado, pero que gracias a las organizaciones sociales y la Iglesia se ha hecho visible para el Gobierno y el mundo.

Monseñor Epalza indicó que aunque mucha gente quiera hacer de cuenta que en Buenaventura no pasa nada, la situación en el puerto sigue siendo dolorosa.



Sostuvo que las denuncias de la Iglesia respecto a la situación social y de inseguridad que se viven en Buenaventura, constituyeron un primer paso. Dijo que "se han venido dando pasitos" para cambiar la percepción del puerto. Agregó que "aquí no pasa nada reconocer que sí hay conflicto y que es una realidad que sobrepasa las cifras y lo que uno se pueda imaginar".

Recordó que la Iglesia, como defensora de la vida humana y promotora de la cultura de la vida "defiende los derechos de la población afro que en Buenaventura es el 80%, el 17% mestiza y el 3% indígena".

Teniendo como precepto el mandamiento que reza "no matarás", recordó que fue la Iglesia la que junto con las organizaciones sociales dio la voz de alerta "que también se quiso opacar e intimidar", pero resaltó que fue mayor la valentía y el coraje "para evidenciar lo que ocurría y decir que los habitantes de Buenaventura quieren vivir con dignidad y están cansados de los desaparecimientos, de los asesinatos, de las balaceras".

Monseñor aseguró que "algo ha cambiado en Buenaventura", principalmente porque la intervención del Estado, que indica, no es solo militar, "ha permitido que los encargados retengan y juzguen a muchas personas de estas bandas delincuenciales que han azotado sin piedad a Buenaventura. Sin embargo, no se puede bajar la guardia".

El Obispo de Buenaventura hizo eco de la campaña "Soy Capaz", para señalar que la paz empieza "en familia, en el barrio, la comuna en la que vivamos, no se puede ser indiferentes, nos tiene que doler Buenaventura, no todo depende del Gobierno. Hay cosas que le pertenecen a la sociedad civil".

Mayor inversión

Entre tanto, la Sociedad Portuaria y las empresas de Buenaventura indicaron que la situación actual de la ciudad requiere intervención directa y trabajo conjunto de todos los sectores que influyen en ella, y no solamente actividades desarticuladas que no unan a las entidades públicas y privadas.



Víctor Julio González, gerente de la Sociedad Portuaria de Buenaventura, manifestó que es mucho el dinero que se paga por concepto de impuestos de las empresas que operan en esa ciudad, el cual no se ve invertido por las autoridades locales, teniendo en cuenta las necesidades de sus habitantes.

"Hay total desarticulación del sector público y privado; si no se hace, no habrán programas de impacto; no se puede trabajar de manera aislada (…) Somos concientes de que las necesidades superan a las posibilidades del sector privado, por eso es necesario el apoyo del Estado (…) La Sociedad Portuaria tiene más de 800 trabajadores y el 25 por ciento son de la región; estamos generando empleos indirectos por el orden de los tres mil trabajos", sostuvo González.