Comerciantes no pudieron pasar su mercancía a Venezuela porque funcionarios de la Dian no llegaron

Empresarios de Norte de Santander y Táchira aspiraban la autorización del gobierno colombiano para el ingreso y salida de vehículos de carga con diversos productos por el Puente internacional Francisco de Paula Santander, el cuál fue reabierto este miércoles.

Sin embargo, no fue posible sacar la mercancía debido a que los funcionarios de la Dian nunca llegaron a sus puestos de trabajo. Carlos Luna, presidente del Comité Intergremial de Norte de Santander, dijo a RCN Radio que "empresarios y comerciantes de la región llegaron desde muy temprano con la expectativa de una pronta reactivación, cumplieron las exigencias de la Dian, pero aún así, no hubo respuesta por parte del gobierno nacional".

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Según el líder gremial se había ubicado un camión con mercancía en el sector de la frontera, vehículo que había salido de la zona franca de Cúcuta con varios productos, con el objetivo de movilizarse hacia Venezuela, pero en el último paso para sellar los documentos que se requieren no apareció ningún funcionario de la Dian.

Así mismo, Carolina Moros, empresaria cucuteña dijo que: "necesitamos que la Dian nos selle el documento para que nos diga que no. Vamos a retornar a la zona franca, para hacer el reingreso de la mercancía. Este no es un intento fallido, sino un ejercicio que necesitábamos hacer, porque en La Guajira estas operaciones están funcionando".

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"Líderes gremiales en Norte de Santander piden igualdad constitucional, así como en Paraguachón hay comercio binacional con Venezuela, por esta frontera también se debe ejecutar, con el objetivo de reactivar la economía,  evitar la ilegalidad que ha tomado fuerza por las diversas trochas que son controladas por parte de los grupos armados", dijo Moros.

Las causas por las que se cerró la frontera colombo-venezolana en Norte de Santander, por parte del Gobierno de Nicolás Maduro en el 2015 siguen activas; la inseguridad, la ilegalidad, el contrabando, la trata de personas, el microtráfico, la existencia de grupos ilegales, la inestabilidad económica, la falta de empleo y la informalidad laboral.

El nuevo ingrediente llega en el 2020 con la presencia de la covid-19, las autoridades colombianas consideran que se requiere de mayor control de bioseguridad.