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Cárcel Palogordo
Suministrada

En la madrugada de este lunes, cerca de 2.150 internos de la cárcel de Palogordo, ubicada en Girón, Santander, se declararon en huelga de hambre indefinida, como forma de protesta por presuntos tratos inhumanos de miembros del Inpec y por negativas ante algunas visitas.

No es la primera vez que los privados de la libertad denuncian la presunta violación de los Derechos Humanos y van a huelga de hambre para exigir la presencia de los diferentes entes de control, a fin de verificar el comportamiento de los guardas.  

“Acabo de recibir una llamada de uno de los internos de la cárcel Palogordo, que hacen parte de la antigua sede, y me informa que a partir de hoy se dio inicio a una huelga de hambre en todo el centro penitenciario”, explicó Hernando Mantilla, defensor de los derechos de los internos en Santander.

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Además de los supuestos malos tratos, los internos también reportan abuso de la fuerza en medio de las requisas a las celdas, por medio de las autoridades incautan drogas, armas artesanales y armas blancas, y cuadernos en los que tendrían información para extorsionar.

Si bien indican que no se oponen a estos controles, piden que sean bajo los parámetros del respeto y no abusando de su poder, pues en muchas ocasiones, según lo han denunciado estas personas, las celdas quedan completamente destruidas. Hechos que se suman a otros presuntos malos tratos.

“Uno de los motivos es que todavía no hay visitas para mayores de 60 años ni para niños y aún se desconoce si habrá visitas el día de las elecciones, es decir, el domingo 13 de marzo. Otro de los motivos está relacionado con el mal estado en el que les están entregando los alimentos, muchos en descomposición y en muy bajas cantidades”, agregó Mantilla.

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Por estos motivos, y ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo con las directivas de la cárcel Palogordo, los internos piden que funcionarios de la Defensoría y la Personería hagan presencia en el centro penitenciario para evaluar la situación. 

“Hay que decir que otro de los temas está relacionado con los traslados hacia otras cárceles del país y de Santander, pues ellos señalan que los llevan amarrados en un bus en condiciones deplorables y sometidos a temperaturas muy intensas”, concretó el defensor de los derechos carcelarios.

Hacinamiento

Otro de los grandes problemas que se vive al interior de las cárceles de Santander está relacionado al hacinamiento y a los riesgos de salubridad.

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El reporte de este lunes indica que solo en Bucaramanga, el sobrecupo alcanzó el 1.210 %, cifra que aumenta durante los fines de semana, debido a las capturas que las autoridades hacen en medio del desarrollo de los operativos de sábados y domingos.

Para el caso de las estaciones de Policía, las del centro, norte y sur siguen registrando las situaciones más complejas, con más de 550 capturados y solo 75 condenados.

Fuente

Sistema Integrado de Información

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