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Los afiliados a CAMACOL, mostraron su preocupación por la crisis generado por la protesta indígena.
Cortesía Camacol

Voceros de la Cámara Colombiana de la Construcción en Nariño mostraron su preocupación por los efectos del paro indígena en este departamento, los cuales incluso ya se han sentido en su sector.

Camacol sostuvo que muchas obras han tenido que ser suspendidas por la falta de materiales, lo cual está llevando al gremio a una posible crisis.

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Según los constructores, por esta parálisis están en riesgo los puestos de 28 mil trabajadores. En las principales obras se instalaron letreros de gran formato en los que se puede leer: “obra suspendida por el paro indígena”.

Víctor Rivas, miembro de este sector, sostuvo: "ubicamos 30 pasacalles en las principales obras que tenemos suspendidas, para que sientan a nivel nacional que los problemas no solo son en Cauca y Valle, sino también en Nariño".

"Lograremos con ello contribuir a sensibilizar al Gobierno Nacional y a los indígenas también, porque a los indígenas se les ocurre hacer estos paros y nos dejan cruzados de brazos; en el 2016 paramos 52 días y tal como van las cosas, este paro se nos va hasta Semana Santa”, explicó.

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Los constructores piden celeridad por parte del Gobierno para solucionar los inconvenientes que genera la protesta social del Cauca, pues ya no hay cemento ni materiales para la construcción.

Ante esto, el gobernador Camilo Romero pidió avanzar con diálogo efectivo para superar el paro que tiene en grave crisis al Nariño.

Fuente

Sistema Integrado de Información

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