¿Cómo formar líderes?

Dijo alguna vez el programador estadounidense Alan Kay, “La mejor manera de predecir el futuro es inventarlo”.Hay ideas que podrían innovar y cambiar paradigmas, incluso generar proyectos de alto impacto mundial. Sin embargo, muchos las guardan para sí mismos porque no están convencidos de lo valiosas que son. Y vale la pena preguntarse, ¿qué hacer para que se animen a compartirlas?

Si todos activáramos el chip de liderazgo que llevamos, posiblemente el mundo tendría mejores condiciones de vida y más que eso, si al activarlo se empleara de forma positiva encaminado a propósitos que nos beneficien.De acuerdo con Patricia Cipagauta Esquivel, Coordinadora de Permanencia Estudiantil de la Universidad Católica de Colombia, “cuando hablamos de liderazgo nos referimos a un conjunto de habilidades y características que hacen que una persona tenga la capacidad de influir en el comportamiento de los demás, llevándolos al cumplimiento de objetivos individuales y grupales”.

Cuando se trata de formarnos como líderes, es fundamental darnos la posibilidad de que creer en nosotros mismos. “Es importante que cada persona se conozca a sí misma e identifique sus debilidades, fortalezas, temores y oportunidades. Luego trabajar en ello para afianzar potencialidades y superar los obstáculos del comportamiento o formas de pensar, que pueden convertirse en barreras para ejercer liderazgo”, comenta la doctora Cipagauta.

Hay liderazgo cuando se apuesta a la calidad personal y laboral de todo ser humano. Por lo tanto, formar líderes para nuestro país es fundamental. “En el ámbito laboral y académico es de suma importancia, pues son los líderes quienes finalmente logran llevar a la realidad, junto con los equipos de trabajo, la misión y visión que define cada empresa o institución. Hay otros ámbitos como el familiar y el personal, en el que desarrollar la capacidad de liderazgo también es importante para hacer realidad las metas del núcleo familiar y el proyecto de vida individual”, comenta la doctora Cipagauta.

Este es un proceso que invita a dar rienda suelta a nuevas ideas porque es cierto eso que dicen sobre: “no hay malas ideas sino aplicaciones equivocadas". La autoestima de cada persona “influye de manera primordialteniendo en cuenta que sin una buena autopercepción y confianza en las propias habilidades, es muy difícil confiar en los demás o ser capaz de incentivar a otros a lograr metas”, concluye la especialista.