Por esta razón Dakota Johnson asiste al terapeuta después de rodar sus películas

La actriz Dakota Johnson se ha desecho de la mejor manera de su personaje de niña buena y sumisa en '50 sombras de Grey' para ser todo lo contrario en 'Suspiria', su última película. Dirigida por Luca Guadagnino, esta cinta es un remake del filme 1977 que lleva el mismo nombre y estuvo bajo la dirección de Dario Argento. 

'Suspiria' gira en torno a algo maligno que ocurre en una reconocida academia de danza a la cual Susie Bannion (Dakota Johnson) recién ingresó. En su primer día como parte de esta institución se entera de que la alumna expulsada Pat Hingle (Chloë Grace Moretz), fue asesinada. Y las cosas se tornan peores cuando los homicidios continúan en un efecto dominó.  Más tarde, Susie se enterará que la academia guarda un oscuro secreto. 

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El pasado mes de abril, en una entrevista con la revista Elle, Johnson aseguró que "la película la había enamorado tanto que tuvo que acudir al terapeuta". Ahora, durante la exhibición de 'Suspiria' en el Festival de Venecia, la actriz fue interrogada al respecto. Esta vez aclaró que es algo que le ocurre con todas sus películas, su nivel de compromiso con sus personajes es tan alto que termina contaminada y le es necesario cerrar el ciclo acudiendo a terapia. 

"Cuando trabajo en un proyecto soy una persona muy porosa y absorbo los sentimientos de muchas personas. En este caso al trabajar con temas oscuros, esto puede permanecer contigo y hablar con alguien agradable sobre eso es una buena manera de desprenderse del proyecto", expresó la actriz a Entertainment Weekly. 

Agregó que el rodaje de 'Suspiria' lejos de convertirse en una experiencia traumática, fue una experiencia divertida. "Fue lo más estimulante y alegre que pudo haber sido... Es traviesa y juguetona. Realmente me encanta". La película llegará a las salas de cine el 2 de noviembre. 

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Al igual que Dakota Johnson, la actriz Taissa Farmiga, quien interpreta a una joven novicia en 'La Monja', película próxima a estrenarse, también buscó formas alternas para desprenderse de la oscuridad de la historia que rodó. 

Para despojarse de todo el terror y la mala energía que 'La Monja' transmitía, la actriz empezó a practicar meditación. "Es necesario dejar todo el estrés y el terror en el set. Separarlo todo de mí misma. (...) parte de la meditación que he estado practicando consiste en controlar los pensamientos, aunque no es fácil", asegura Farmiga en entrevista con el medio especializado Sensacine.