Leonor Bonilla, madre del intendente de la Policía Luis Hernando Peña Bonilla, recuerda con dolor aquel primero de noviembre de 1998 cuando las Farc arrasaron y dejaron en ruinas la población de Mitú (Vaupés). 

Esa madrugada la violencia de la guerrilla dejó 43 personas muertas entre ellas varios integrantes de la Policía Nacional, el Ejército y civiles; también hubo 47 heridos y 61 uniformados secuestrados. 

Al cumplirse 20 años de ese lamentable episodio que es la prueba de la cruda violencia que debió afrontar el país en la guerra del Estado con las Farc, la madre del suboficial Luis Hernando Peña Bonilla con voz entrecortada dijo a RCN Radio que sólo tenía fuerzas para entregar un mensaje, tras dos décadas del secuestro y desaparición de su hijo. 

“Mi mensaje es para los señores de la Farc que están haciendo política, que están en el Congreso, tengan la bondad y me expliquen ¿qué hicieron con mi hijito Hernando?, ¿dónde lo dejaron?, ¿dónde está? Les pido que me lo devuelvan, no hemos sabido nada de él”, dijo.  

Y agregó: “Son 20 años de incertidumbre, de dolor, de sufrimiento (…) esperamos que nos den alguna noticia, ¿dónde está mi hijo?, ¿por qué no le devuelven vivo o muerto?, como se encuentre”. 

Leonor Bonilla dijo que la última noticia que tuvo de su hijo es que lo habían fusilado, según el relato de uno de sus compañeros de cautiverio que años después fue liberado. “Ningún día he tenido paz, todos los días vivo recordando”, puntualizó. 

La versión del general Mendieta  

El general (r) Luis Herlindo Mendieta fue otro de los uniformados que resultó secuestrado por las Farc en la Toma de Mitú ocurrida el 1 de noviembre de 1998. En ese entonces, Mendieta ostentaba el grado de teniente coronel y fue ascendiendo hasta convertirse en el oficial de más antigüedad en la institución. 

Justamente hace pocos días, al entregar su testimonio ante la JEP sobre el secuestro que pacedió por más de 12 años, recordó que en la toma de Mitú 2.000 guerrilleros atacaron a 76 uniformados y 30 auxiliares bachilleres de la Policía. 

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“A las 4 de la mañana los terroristas de las Farc lanzan diferentes artefactos con bazucas, tatucos, granadas. El colegio quedó totalmente destruido, en una esquina del comando había un hueco donde 16 policías se ocultaron. A mí alias ‘Urias’ me coge como rehén mientras alias ‘Boyaco’ rocía con gasolina donde estaban ocultos los policías”, contó. 

También relató que durante la toma 17 policías murieron, muchos de ellos incinerados en las improvisadas trincheras. Todo esto sucedió por orden de alias 'Romaña', alias 'Buen Día', alias 'Joaquín', y alias 'Jairo', todos ellos bajo el mando a través de radio teléfono por el otrora terrorífico ‘Jorge Briceño’ o ‘Mono Jojoy’. 

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“De Mitú fuimos secuestramos 45 oficiales y suboficiales y 16 auxiliares. En intercambio solo quedamos siete que éramos los mandos”, manifestó. 

Como si se tratara de una catarsis, entre lágrimas Mendieta pasó a recordar a sus compañeros de cautiverio que perdieron la vida, dentro de quienes también estaba el intendente Peña.