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El hombre que lleva 50 años con un brazo en alto, ¿Por qué?
Un hombre lleva más de 50 años con un brazo en alto.

Hace unos años, uno de los castigos más comunes para mantener el control en los colegios de muchos países de América Latina era mantener por cierto tiempo los brazos en alto

Hay quienes no recuerdan con mucha alegría esas épocas de la disciplina impartida donde resultaba ser muy doloroso mantenerse con los brazos en alto.

Ahora bien, por mucho que alguien lograra mantener en alto sus brazos, seguro no puede alcanzar el récord de Amar Bharati, quien lleva un tiempo realmente insólito con una de sus extremidades arriba.

El hombre, de acuerdo a los datos que se han conocido, lleva 50 años con el brazo en alto en señal de gratitud y fe a su ciudad.

Amar Bharati, que completó toda una vida trabajando como banquero, se percató de que estaba insatisfecho con su vida. Por eso, tomó la decisión de cambiar el rumbo que llevaba. De ahí que decidió convertirse en saghu.

Ese nombre, en la religión hindú, es adquirido por un monje que sigue el camino de la austeridad y penitencia para alcanzar la “iluminación y felicidad”.

En esa nueva senda que emprendió este hombre nacido en la India, también optó por adoptar una de las penitencias más inusuales que existen.

Se trata de mantener su brazo derecho en alto, algo en lo que completa 50 años, un tiempo bien distante del que se impartía como castigo en los colegios.

Amar Bharati completó dos de las cuatro fases de la vida, de acuerdo a lo establecido por el hinduismo. Paradójicamente, el hombre estudió para lograr ser trabajador de la banda de la India y también tenía tres hijos. Aun así, no era feliz con su vida.

De ahí entonces la determinación de iniciar su penitencia de mantener el brazo levantando por la paz mundial, en honor del dios Shiva.

Lo curioso además es que aunque Bharati quisiera bajar su brazo no podrá hacerlo, ya que mantener esta posición por tanto tiempo ha provocado que sus músculos se atrofien, los cartílagos de su hombro y codo se han secado por completo.

Amar Bharati si quisiera bajar su brazo solo podría hacerlo rompiéndoselo… y todo por una penitencia.

El hombre dijo en una entrevista que los dos primeros años de penitencia fueron los más complicados, al semejarse a una verdadera tortura.

Pese a todo el dolor padecido, el hombre se mantiene firme con un solo propósito: mantener su brazo en alto por la paz mundial y honrar a Shiva.

Fuente

Sistema Integrado Digital

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