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La felicidad y una alta autoestima son la medicina para no envejecer

Una autoestima alta, y la disposición a la alegría y felicidad, pueden servir como protector contra enfermedades, así lo asegura el profesor José Antonio Flores, catedrático de Ciencias de la Conducta de la Universidad de Oviedo, en España.

"La autoestima es la auténtica medicina contra el envejecimiento, pues cuando es baja supone un caldo de cultivo adecuado para que se potencie el envejecimiento patológico”.

El Profesor afirma que el cerebro está fabricando medicamentos de forma continua y que depende del ser humano la utilización del mismo para fabricar sustancias positivas que favorecen las defensas y alargan la vida.

La apetencia de bienes materiales, que es considerada como éxito por la humanidad; nada tiene que ver con la felicidad, al contrario se convierte en inhibidores de la misma y en un virus que se está pasando de generación en generación, dice José Antonio Flores.

La disposición de estar en tranquilidad y mantener un estilo positivo ante la vida, se resume en longevidad y en la actitud perfecta para no sufrir grandes enfermedades.

La vida no es más que la maravilla de existir, es la gran premisa del catedrático que invita siempre a sonreírle al mundo.