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Caritas de felicidad
Caritas de felicidad.
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La felicidad tiene muchas definiciones, distintas. Pero hay características que son comunes en las diferentes culturas y religiones, en prácticas y ciencias como la psicología e, incluso, en la economía, que identifican parámetros para que una persona reconozca esa satisfacción personal inmediata, permanente o trascendental, que le permita decir que es feliz.

Así lo explica el profesor Sebastián Bitar, doctor en Relaciones Internacionales y quien este semestre es docente visitante en la Amherst College, universidad privada en Massachusets, donde dictará una cátedra sobre la felicidad, la misma que ofrecerá a mitad de año en la Universidad de Los Andes, en Bogotá.

Pero el profesor Bitar es claro: “No hay una definición única de la felicidad”. Explica que en el curso que dictará este semestre en Estados Unidos compartirá las tres definiciones o grupos que ha logrado ajustar:

La primera, cuando se habla de la satisfacción personal, el placer. Algo que me da inmediatamente y que luego se me quita”, contó Bitar a RCN Radio.

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La segunda definición de felicidad –según su explicación- es aquella sensación de bienestar permanente, después de haber obtenido un logro, una buena vida o un éxito laboral y familiar.

Y la tercera es trascendente: religiones o filosofías que hablan sobre alcanzar algo mucho más allá de la experiencia humana, como el nirvana, la iluminación o llegar al cielo”, dijo.

El objetivo del curso en el primer semestre, señala Bitar, es que se aprenda sobre estas distintas definiciones y aproximaciones a lo que comúnmente se llama felicidad.

Pero si las definiciones son distintas y dependen den entorno social, cultural y religioso en el que se vive ¿Se puede aprender a ser feliz?

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Sebastián Bitar, doctor en Relaciones Internacionales

0:27 5:25

Las tres claves para ser feliz

“Una persona sí puede aprender a ser feliz a través de una práctica interior de reflexión y de regresar al momento presente constantemente, a través de diferentes aspectos”, dijo el profesor Sebastián Bitar.

Por ejemplo, dijo que se puede trabajar este plano de satisfacción personal a través de ejercicios sicológicos, teniendo una práctica deportiva, de danza. Pero aclaró que debe ser “cualquier cosa que regrese a la persona permanentemente al momento presente y a estar teniendo una práctica reflexiva interior. Es una tarea que puede llevar años, pero sí se puede lograr”.

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Bitar aseguró que ha encontrado e identificado tres elementos y aproximaciones que, independientemente si son científicas o no, si son religiosas o no o si son de culturas de oriente u occidente, pueden ayudar a una persona a ser feliz.

Planeación excesiva del futuro o estancarse en el pasado

Esta es una causa de sufrimiento”, dijo Bitar. Explicó que los seres humanos tiene la capacidad de planear su vida hacia el futuro y de imaginarse escenarios futuros venideros, para poder determinar qué acciones pueden tomar para lograr lo que se quiere.

“Y eso es muy bueno (…) Pero mantenerse en ese espacio de planeación todo el tiempo causa mucha angustia y puede llevar a imaginarse escenarios malos todo el tiempo”, dijo Bitar.

Recomendó como “una buena práctica, aprender a tener ese espacio de planeación cuando se necesita e, inmediatamente, cuando ya se ha logrado lo que se busca, volver al momento presente, respirar y estar conectado con lo que está pasando alrededor, con el aquí y el ahora”.

De otro lado, señala el profesor Bitar, otra causa de angustia y sufrimiento es estancarse en el pasado. Eso le pasa a la “persona que está todo el tiempo culpándose y pensando en lo que pasó; no lo deja ir y no está viviendo el tiempo presente”.

Agradecer

El profesor Bitar recomienda mantener una comportamiento permanente de agradecimiento, porque les da a las personas una sensación un bienestar. Comer bien, darse la licencia de ir a un spa o cuando se compra algo que se desea, da la oportunidad de asumir la vida con gratitud.

“Aquí hay una diferencia entre vivir la vida agradeciendo o vivir la vida exigiendo. Cuando eso pasa, se sufre. Lo que le llega la mayoría de las veces no va a ser lo que uno exigió. Mientras que si uno vive la vida agradeciendo cualquier cosa que le llegue, uno lo va a recibir con un corazón abierto”, dijo.

Relaciones sociales significativas

Es este punto, el profesor Bitar remarca el término “significativas” en las relaciones sociales que una persona debe mantener en todos los momentos de su vida, incluida la vejez, en la que se puede –y debe- incluir a la familia y los amigos.

“También (lo puede hacer) una persona puede estar completamente desconectada de su familia y de sus amigos. Pero si tiene una buena relación con las personas cuando le sirven un café, por ejemplo, o cuando el médico lo atiende, se monta al bus y saluda a la persona que maneja, su forma de interactuar con otras personas le llena de conciencia. Que (la relación social) sea significativa, que sea presente”, precisó.

Fuente

RCN Radio

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