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En la madrugada del pasado 4 de julio, un adolescente caraqueño de 16 años manchó sus manos de sangre al asesinar a su mamá y abuela, y herir a su hermana menor y a su abuelo con un cuchillo de cocina.  

Durante el terrible ataque la niña recibió una herida en el cuello, sin embargo, logró salir de su casa y pedir ayuda a los vecinos mientras el anciano trataba de forcejear con su nieto para desarmarlo, pero el menor logró imponerse golpeándolo en la cabeza y apuñaleándole un brazo.   

Según relata el anciano, el adolescente no identificado, se levantó de su cama a las tres de la madrugada, fue a la cocina y tomó un cuchillo. Se acercó hasta la habitación de su madre, y procedió a atacar a su abuela identificada con el nombre de Aracelys Hernández, y luego asesinó a su mamá, Mari Rosales.  

 Al escuchar los gritos de las dos mujeres, el abuelo y la niña corrieron en su auxilio, pero ya era tarde.   

Luego del vil asesinato, el joven regresó a su habitación y se acostó. A los minutos llegaron los vecinos y se encontraron con la escena del crimen y al asesino dormido. A los pocos minutos llegaron las autoridades, quienes al preguntarle por qué había matado a su familia, el adolescente se limitó a decir en varias oportunidades: "Yo no fui, yo no fui. Les juro que yo no maté a mi mamá". 

Lo curioso de este hecho surge cuando el abuelo comentó que su nieto estaba como poseído por una entidad espiritual cuando este los atacó. Según reseñan algunos medios de comunicación en Venezuela,  la familia practicaba la santería, un sistema de cultos que combina elementos de distintas creencias y prácticas. Forma parte del llamado sincretismo religioso, que tiene en el vudú haitiano una de sus principales representaciones.  

Tal hipótesis cobra fuerza entre la familia y los vecinos, debido a que el chico es descrito como un buen estudiante, deportista y artista, ya que además de practicar básquet también se dedicaba a la pintura.  

La policía se encuentra investigando lo sucedido y así descartar si en realidad el tema religioso influyó en que el adolescente cometiera el asesinato.  

Fuente

RCN Radio

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